En las últimas horas, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, volvió a hablar sobre el escándalo protagonizado por su ex jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, y prometió que, de cara a los próximos cuatro años de Gobierno, reorganizará su equipo y sostendrá la disolución del puesto que antes ocupaba el líder peronista de Lomas de Zamora.
“Lo que hizo Insaurralde fue grave, todavía no sabemos si fue una operación o no, pero fue grave. Desde mi posición, yo no estaba al tanto de su viaje a Marbella, no sabía que estaba en un yate, pero más allá de eso, sus acciones son incompatibles con mi Gobierno”, remarcó Kicillof en una entrevista televisiva.
En ese sentido, el Gobernador bonaerense se refirió a las elecciones generales, en las que cosechó casi el 45% de los votos de la provincia de Buenos Aires, y destacó que no hay una lectura real por parte de su equipo en cuanto al impacto del escándalo de Insaurralde en la intención de voto de la población para con él.
“La realidad es que uno se gana la intencionalidad del voto de la gente con políticas económicas, sociales, habitacionales, y un sinfín de etcéteras, y con la gestión que hizo en la provincia de Buenos Aires, y si bien lo de Insaurralde fue relevante, lo que le importa a los bonaerenses es vivir bien”, señaló Kicillof.
Asimismo, Kicillof reconoció que en sus próximos cuatro años de gestión “no va a haber Jefatura de Gabinete en la provincia de Buenos Aires, ni quienes desempeñen esos cargos”. “Se va a reorganizar el Gobierno, pero hay muchos otros factores que van a influir en las decisiones finales de la nueva estructura”.
En este contexto, el Gobernador de la provincia de Buenos Aires mencionó que uno de los factores fundamentales de cara a la nueva organización de su gabinete será el resultado del balotaje entre Sergio Massa y Javier Milei. “El escenario no va a ser el mismo si gana Massa que si gana el candidato de la oposición”, reforzó.
Es preciso mencionar que, desde Unión por la Patria le adjudican gran parte del triunfo electoral de Massa en las elecciones del pasado domingo al gobernador de la provincia de Buenos Aires, ya que luego de la instancia primaria, Kicillof dedicó sus días a gestionar en territorio bonaerense y marcar las diferencias entre el candidato del oficialismo y la oposición.
En tanto, de cara al balotaje que Massa deberá enfrentar el próximo domingo 19 de octubre, Kicillof continúa su trabajo de acompañamiento al candidato presidenciable de Unión por la Patria, con quien este domingo compartió el acto de jura y asunción del gobernador electo de la provincia de Tucumán, Osvaldo Jaldo.
“La campaña va a terminar en cada una de las provincias cuando lleguemos al balotaje y Massa sea el presidente. No es solo una cuestión partidaria. Está en juego algo importante para cada una de las provincias argentinas, particularmente para Buenos Aires, una provincia productiva, de trabajo, que necesita salud y educación pública, y todo esto está en riesgo con el proyecto de Javier Milei”, enfatizó Kicillof luego del acto en Tucumán.
Para finalizar, Kicillof señaló que las propuestas del candidato de La Libertad Avanza “muchas veces no quedan claras adrede, y el trabajo de Unión por la Patria es clarificarlas, para que toda la población entienda lo que la oposición quiere hacer con la Argentina y como sus políticas pueden afectar a cada uno de los sectores que hoy están en situación de vulnerabilidad, y a los que no también”.
