El investigador y activista, autor del último libro de la editorial Nido de Vacas, ofrecerá un taller en el Centro Integrador Comunitario – El profesor Evangelista, integrante del sello, que patrocina el referido ciclo, adelantó los conceptos a abordarse en esta oportunidad
El próximo sábado 11 de noviembre las 10 hs. en el Centro Integrador Comunitario (ubicado en Av. 20 de Diciembre y Azara) se llevará a cabo el taller “¿Cómo politizar nuestra salud mental?”, coordinado por el investigador y activista Emiliano Exposto, autor del libro “Las máquinas psíquicas. ¿Qué hacer con la crisis de la salud mental?”, recientemente publicado en el marco de la colección FilosoQué por la editorial rojense Nido de Vacas. La actividad es gratuita y abierta a la comunidad y está organizada en conjunto por Nido de Vacas y el Equipo Territorial de ESI de la Región 13.
Además, el viernes 10 se llevará a cabo un taller de similares características en el Bachillerato Popular la Grieta, de la ciudad de Pergamino, en una actividad organizada en conjunto con la asociación civil La Cuerda y el Centro Cultural Registrarte.
«Filoso-Qué?» es un ciclo de charlas y talleres de filosofía para todo público, que desde el año 2016 se lleva a cabo en Rojas y sus municipios aledaños. Se han realizado hasta el momento más de cuarenta jornadas, en las que distintos pensadores y pensadoras han compartido sus reflexiones y recorridos. Asimismo, se han realizado hasta el momento ocho talleres de lectura mensuales en la Biblioteca Municipal. Además, desde el 2018 el proyecto editorial Nido de Vacas sostiene una colección de libros de filosofía que tiene como objetivo profundizar y consolidar en el tiempo, el trabajo realizado en dichas actividades.
“No era depresión, era capitalismo”, reza la leyenda de la revuelta chilena de 2019. En esa frase se cifra un enigma que interroga las estrategias de liberación psíquica colectiva. La pandemia, por su parte, evidenció que la salud mental es un problema político fundamental. Estos acontecimientos muestran que terapeutas y periodistas, artistas y docentes, editores y diseñadores, investigadores y activistas, ecologistas y arquitectos, estamos en el centro de una disputa anímica. La crisis anímica colectiva se manifiesta en síntomas sociales encarnados en nuestra vida personal. Nos referimos a la depresión, el insomnio, el estrés, el suicidio o la ansiedad. Estos malestares constituyen índices de verdad histórica. El taller “¿Cómo politizar nuestra salud mental?” se propone como un espacio de reflexión e intercambio en torno a la sospecha de que no hay cura individual sin cura colectiva.
Emiliano Exposto (Claypole, 1988) es investigador y activista. Doctor de Filosofía por la Universidad de Buenos Aires y becario de Conicet. Docente en la Cátedra “Construcción histórica de la subjetividad moderna”, fundada por León Rozitchner en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA. Integra la editorial Coloquio de Perros, coordina grupos de estudios y colabora con colectivos, instituciones y movimientos. Escribe en Tierra Roja, La Tinta y Lobo Suelto, entre otros medios. Con la Cátedra Abierta “Félix Guattari”, compiló el libro Guattari: revolución molecular y lucha de clases (Red Editorial, 2021). Junto a Gabriel Rodríguez Varela es coautor de los libros El goce del capital. Crítica del valor y psicoanálisis (Marat, 2020) y Manifiestos para un análisis militante del inconsciente (Red Editorial, 2020).
En diálogo con Radio Rojas, Ezequiel Evangelista, integrante de Nido de Vacas y principal impulsor del ciclo patrocinado por el referido sello, explicó al respecto que “la pandemia aceleró y visibilizó una serie de fenómenos que venían desarrollándose, que tienen que ver no solamente con la digitalización de la vida, sino con aquello que trae aparejado, que está relacionado con la posibilidad de manipular, o al menos condicionar, cuáles son los debates, los temas, las perspectivas con las que tenemos que mirar la realidad. Este tipo de iniciativas intentan ir a contramarcha de esos mandatos que desde distintos poderes intentan coartar las posibilidades, o uniformar u homogeneizar el pensamiento”.
Profundizando sobre los ejes de la propuesta de Exposto, Evangelista reflexionó que “es muy difícil mantener la cabeza ordenada en esta época; precisamente mencionábamos el rol de los medios de comunicación, pero también tiene que ver con las redes sociales, y podríamos conectar esta reflexión con otras transformaciones que se vienen dando, como por ejemplo la precarización de la vida, la explotación laboral, el desempleo, la desigualdad, la crisis habitacional, conflictos que son laborales, productivos, sociales, que también impactan sobre nuestra salud mental”.
Así, precisó, “Emiliano Exposto nos invita a pensar que estas transformaciones, estos procesos sociales que se vienen dando y que la pandemia aceleró, desde la perspectiva de la salud mental, desde la necesidad de pensar una salud mental popular, es decir, pensar a la salud mental en un sentido más amplio, no solamente en el sentido disciplinario, que es una pata fundamental, sino pensar a la salud mental como toda práctica de cuidado colectivo más allá de la mediación de los profesionales, pensar cómo producimos salud mental en distintos espacios sociales a los efectos de poder reimaginar la salud mental desde un punto de vista interseccional o popular”.
Es que, resumió, “se piensan los malestares como dimensiones individuales, privadas, a las cuales hay que intervenir con medicación o con tratamientos, pero que en definitiva son problemas individuales; en este caso, Emiliano nos invita a pensar que son el resultado de problemáticas sociales estructurales, que tenemos que empezar a detectar cuáles son las experiencias de organización popular que ya existen y que de alguna manera implican lógicas de cuidado mutuo, que intentan ir justamente a contramarcha que desde los distintos poderes nos intentan imponer para domesticar nuestras virtudes”.
SALUD MENTAL POPULAR
«Emiliano estudió filosofía, es doctor en filosofía por la Universidad de Buenos Aires, es docente de la cátedra Construcción Histórica de la Subjetividad Moderna, históricamente dirigida por León Rozitchner, que es una referencia para pensar este cruce entre psicoanálisis y teorías críticas. Lo interesante es que además de su trabajo como profesor, como académico e investigador, también es activista en salud mental, de allí que participa en la cátedra abierta ‘Félix Guattarí’, en el marco de la cual vienen haciendo este trabajo de investigación militante, de registrar las experiencias que ya están sucediendo en diversos campos de la organización social, a los efectos de repensar desde las coordenadas esta salud mental popular o salud mental desde abajo. Su libro se llama ‘Las máquinas psíquicas, ¿qué hacer con la crisis de la salud mental?’. Es un texto que ya había sido publicado hace unos años por otra editorial de similares características a Nido de Vacas y ahora lo que se hizo es una actualización, y una puesta en circulación en otros espacios. Emiliano visitó Rojas en el año 2016 cuando apenas arrancamos con el ciclo Filosoqué junto con un grupo que integraba en ese momento y que se llamaba ‘El loco Rodríguez’. Estamos muy conformes con la edición de este libro, donde participó de las ilustraciones Fede Calabia, que es un artista plástico muy groso de Pergamino. Lo que trata Emi es un tema de mucha actualidad, donde todos, todas y todes estamos leyendo o escuchando sobre salud mental; en las redes sociales aparece todo el tiempo la utilización un tanto profana o callejera de diagnósticos médicos, y por esto es que es difícil hablar del tema, porque es fácilmente malinterpretado, más aún cuando uno mira el DCM y se puede encontrar a sí mismo en muchas categorías (risas). Estamos en un momento en que el tema ‘salud mental’ está bastante a la mano y el desafío que nos propone Emi es disputarlo y tratar de pensarlo en términos lo más amplio y complejos posibles, porque hay un montón de actores que están interviniendo sobre ese aspecto tan delicado de nuestras vidas. So se trata de cancelar cualquier psicoterapia, sino entender hasta qué punto tanto los actores privados como el propio rol del Estado, pueden recaer en lógicas que no hacen más que victimizar u objetivar a los sujetos que padecen malestares o sufrimientos”.