En ese sentido, consultoras privadas sostienen que, tras una desaceleración en los precios de los alimentos en la última semana del mes, la inflación de febrero “estaría en un rango de entre el 15% al 18%“.
Tal es así que, la consultora privada LCG sostuvo que “los productos de la canasta básica (que tienen una alta incidencia en el IPC) mostraron una leve desaceleración en la cuarta semana del mes, del orden de 1,4%, por lo que la suba promedio de las últimas cuatro rondaría el 11,4%“.
Mientras que, el titular del Palacio de Hacienda pronosticó que en febrero la inflación “va a estar más cerca de 10% que de 20%“. “Vamos a ver una baja sustancial que es producto del control fiscal y monetario que estamos llevando a cabo“, explicó.
En la misma sintonía, y en la antesala a su discurso en la apertura de las sesiones ordinarias en el Congreso de la nación, el presidente Javier Milei, afirmó que “la casta está nerviosa porque la inflación está bajando“.
En esa línea, desde la consultora EcoGo estimaron que la inflación de febrero fue de 15,9% en promedio. “Para marzo creemos que va a estar levemente por encima, en la zona del 16/17%“, indicó el analista de la consultora, Lucio Garay Méndez.
En tanto, desde Focus Market, Damián Di Pace, calculó el aumento inflacionario en 14,8%. En particular, la suba de los precios en los productos de consumo masivo fue del 9,8% en febrero, algo que ocasionó una caída en los niveles de compra de casi el 23% en ese lapso.
También, el director de Ferreres & Asociados, Fausto Spotorno, consideró que la inflación “va a bajar un poco en febrero, cerca del 15%”. “Se empezó a sentir en la segunda semana de febrero con inflación más baja y eso se va a mantener”, señaló.
“Igual estamos hablando de inflación alta y todavía quedan muchos precios por terminar de ajustar, como tarifas de servicios públicos y salarios que van a seguir generando una inercia en los precios”, señaló Spotorno.
Según las mediciones de la Fundación Libertad y Progreso, la inflación de febrero llegó a 16,8%, desacelerándose 3,8 puntos porcentuales respecto de la medición oficial de enero (20,6%). “En el primer bimestre del año el IPC acumula una suba de 40,9% y la variación interanual alcanza el 288, el valor más alto desde marzo de 1991”, explicaron.
Es preciso señalar que, la evolución de la inflación de febrero tuvo una variación sustancialmente alta por la la actualización de tarifas en el transporte público del AMBA.
“A partir de la segunda semana del mes, los datos convergieron a variaciones en el rango del 2%-3% semanal, manteniendo la tendencia de la última quincena de enero y ubicándose en valores similares a los de septiembre del 2023”, estimaron desde la entidad.
Cabe destacar que, la última semana de febrero deja un arrastre de tres puntos porcentuales para marzo, unos 0,2 puntos menos que en enero, por lo que para marzo también se espera una inflación de alrededor del 15%.
“Si bien los índices de precios seguirán arrojando subas significativas en febrero y marzo, estrictamente la inflación, entendida como el proceso de pérdida de valor de nuestra moneda, se está mitigando, lo que puede verse en la estabilidad del peso frente al dólar”, dijeron desde Libertad y Progreso.
En ese contexto, el economista Lautaro Moschet, sostuvo que “a pesar de que el bolsillo de la gente sigue resintiéndose mes a mes, hay que tener en cuenta que se están generando las condiciones para pensar en un país con baja inflación en el mediano plazo”.
Por último, la consultora ACM analizó que para los próximos meses, el mercado prevé una inflación aún elevada, aunque con tendencia a la baja. Según el Relevamiento de Expectativas (REM,) del Banco Central, ese nivel seria de 18% mensual, disminuyendo a 15,3% en marzo y alcanzando cifras de un dígito para junio.