Ayer, en la sede de LALCEC Rojas, las autoridades de la entidad, acompañadas del intendente Bouvier, brindaron detalles de la actividad – Además, recordaron que está vigente la campaña de prevención de cáncer de mama, y se prepara para el próximo mes la campaña de cáncer de piel o melanoma
Como adelantáramos, convocada por la filial Rojas de LALCEC (Liga Argentina de Lucha Contra el Cáncer), se realizará el próximo sábado 29 la tradicional caminata propuesta por la institución para adherir al Día y Mes de la Lucha Mundial Contra el Cáncer de Mama.
Al respecto, las autoridades de la entidad, acompañadas del intendente municipal de Rojas, Román Bouvier, realizaron ayer desde la sede de LALCEC el lanzamiento oficial de la actividad, e indicaron que, como siempre, no se trata de una competencia sino de una actividad comunitaria para generar conciencia sobre esta enfermedad, sin restricciones en cuanto a los participantes.
El punto de partida será desde el Monumento a la Madre, en la Plaza España, a las 17 del sábado 29, para caminar hasta el Paseo de la Ribera, donde al arribo de los caminantes tendrá lugar un sorteo de obsequios. Estos fueron elaborados a partir de donaciones de los comercios de la ciudad.
Por otro lado, la presidenta de LALCEC Rojas destacó que habrá actividad en la Plaza España desde las 16, ya que habrá un equipo de salud que trabajará sobre la prevención del ACV (accidente cerebrovascular), y además tomará la presión de los interesados y responderán a sus preguntas sobre dicha problemática.
Desde LALCEC recordaron que las interesadas pueden retirar sus órdenes para la realización de mamografías gratuitas en el Unzué. Esta campaña estará vigente hasta noviembre. En tanto, manifestaron con satisfacción que, en el marco de la campaña de cáncer ginecológico se realizaron nada menos que doscientos PAP.
Por su parte, el intendente Bouvier destacó que a través de la aprobación oportunamente efectuada por el Concejo Deliberante de Rojas a un proyecto que proponía instalar en el espacio del Monumento a la Madre, en la Plaza España, el banco rosa alusivo a la prevención del cáncer de mama. A través del área de Parques y Paseos, además, ese espacio fue engalando con los toques de color rosa distintivos de esta campaña preventiva y, según indicó el jefe comunal, será destinado en forma definitiva a albergar las actividades inherentes a la prevención del cáncer de mama, cada mes de octubre, en el marco del día y mes mundial de lucha contra esa enfermedad oncológica.
Cabe mencionar que el cáncer de mama es uno de los que causan más muertes por cáncer en todo el mundo. En Argentina se diagnostican, aproximadamente, 18.700 casos nuevos por año (36% del total de cánceres en mujeres), y se estima que se producen cerca de 5.600 muertes anuales.
Un dato concreto y más gráfico de la incidencia es que una de cada ocho mujeres va a desarrollar cáncer de mama en su vida.
Dado que solo del 12 al 14% de los cánceres de mama son hereditarios resulta interesante profundizar en los otros factores de riesgo de esta enfermedad, como el tipo de alimentación, los hábitos saludables y el estado inmunológico de la persona.
La mayoría de los casos son diagnosticados a partir de un hallazgo anormal en un estudio de control como la ecografía mamaria que debe hacerse a partir de los 25 años y la mamografía a partir de los 35. Las herramientas disponibles en la actualidad para la prevención y el diagnóstico precoz de cáncer de mama son especialmente importantes para aquellas mujeres que presentan mayor riesgo de desarrollar la enfermedad y para las cuales el inicio temprano del tratamiento se traduce en una reducción de la mortalidad.
PREVALENCIA DEL CÁNCER
Más de 60 mil personas mueren cada año en la Argentina como consecuencia del cáncer, por lo que la realización de estudios para su detección así como llevar una dieta balanceada y una vida sana son los pilares para la prevención, informaron desde el Hospital de Clínicas.
“El cáncer es una enfermedad en la que algunas células del cuerpo se multiplican sin control y se diseminan a otras partes del cuerpo, que es lo que entendemos por metástasis”, señaló Joaquín García Morato, jefe de la División Cirugía Torácica del Hospital de Clínicas, en un comunicado difundido por ese centro de salud.
El especialista informó que “los tipos de cáncer más frecuentes en Argentina en mujeres son el cáncer de mama (73 casos por cada 100.000), de útero, colon, pulmón y tiroides; en tanto que en hombres son de colon y recto, próstata, pulmón, riñón y vejiga.
“En las últimas décadas hubo avances significativos contra esta enfermedad. La inmunoterapia, las terapias dirigidas, terapias biológicas, tratamientos génicos y la quimioterapia más eficaz y menos tóxica. También se han producido avances en técnicas quirúrgicas como la cirugía por video (laparo o toracoscópica) y la robótica», sostuvo.
Y añadió que “también hay mejores y nuevos métodos de radioterapia, como la radiocirugía, y la identificación mediante biología molecular de factores pronósticos sobre qué terapia es más adecuada a cada paciente”.
Gracias a estos avances, el especialista describió que «la calidad de vida se incrementó de manera significativa y hubo un aumento en el número de personas que lograron superar la enfermedad respecto de décadas pasadas».
«Considerando todos los sitios tumorales -a excepción del cáncer de piel no melanoma- (126.818 casos), la tasa de incidencia ajustada por edad fue de 212,4 casos por 100.000 habitantes, cifra que posiciona a Argentina dentro de los países del mundo con incidencia de cáncer media-alta (rango 181,1 a 248,3 por 100.000 habitantes)», informó el Clínicas.
“Respecto al diagnóstico precoz -agregó García Morato- es uno de los pilares fundamentales de la lucha contra el cáncer. A los métodos ya aceptados, colposcopia y mamografía en la mujeres, más la colonoscopia, se agregó en los últimos años en los países desarrollados la tomografía computada de tórax para los pacientes fumadores mayores de 50 años”.
El profesional aseguró que el cáncer se puede prevenir. «Desde el hábito de dejar de fumar, directamente relacionado al cáncer de pulmón, llevando una vida sana, dieta balanceada, actividad física. La prevención, junto con el diagnóstico precoz y el tratamiento por un equipo multidisciplinario son los pilares del enfoque actual del cáncer”, sostuvo.
Por último, el especialista indicó que durante la pandemia mucha gente dejó de hacerse los controles: “Si bien no podemos decir que por la pandemia subieron los casos porque no tenemos los datos, claramente por postergación de controles se vieron casos más avanzados o progresión de la enfermedad por falta de tratamiento. Por eso recalcamos la importancia de los controles y los chequeos”, concluyó.
Por otro lado, la gran mayoría de los niños con cáncer viven en países de ingresos bajos y medianos, donde encaran una desigualdad aguda en la detección temprana, el diagnóstico y el acceso a tratamientos de calidad y cuidados paliativos de la enfermedad oncológica, reveló la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esa desigualdad hace variar la tasa de supervivencia entre un 80% y un 20% según el país.
En América Latina y el Caribe, el cáncer es la segunda causa de muerte en las personas de hasta 19 años. Unos 29.000 niños son diagnosticados cada año y los tipos más comunes son la leucemia, el linfoma, tumores de sistema nervioso central, el tumor de Wilms y el retinoblastoma.
La tasa de supervivencia al padecimiento en la región es de 55%, por lo que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) trabaja en la región con el propósito de lograr para el 2030 una tasa de curación del 60%. La cifra es el objetivo global de la iniciativa CureAll.
Hasta ahora, trece países latinoamericanos participan en la iniciativa desarrollando o fortaleciendo planes nacionales de cáncer infantil y ampliando el acceso al diagnóstico y al tratamiento.
El asesor regional de la OPS en prevención y control del cáncer, Maurizio Maza, afirma que aunque América Latina y el Caribe no está lejos de la meta del 60%, se deben hacer “todos los esfuerzos posibles para cerrar las brechas de atención, llegar a todos los niños y adolescentes que lo necesitan y no tener que lamentar muertes evitables”.
Si bien el cáncer infantil no se puede prevenir, la mayor parte de los casos se puede curar con quimioterapia, cirugía y radioterapia. Por ello, es necesario realizar un diagnóstico precoz y preciso seguido de un tratamiento eficaz.
Entre los esfuerzos de combate a la enfermedad en los niños, la Organización Mundial de la Salud y el Hospital St Jude Children´s Research de Estados Unidos presentaron recientemente un proyecto mundial para ayudar a los países de renta media y baja a ampliar su acceso y disponibilidad a medicamentos esenciales para tratar el cáncer infantil.
Una de las causas de la baja supervivencia al cáncer infantil es el alto nivel de abandono del tratamiento, que en los países de América Latina alcanza el 30% en los países de ingresos bajos y medios.
Para contrarrestar esta deserción, la agencia regional lanzará la campaña #DecideATiempo, que compartirá historias de niños, adolescentes y familias que tomaron la decisión oportuna de completar su tratamiento y lograron salvar su vida.
A diferencia de lo que ocurre con el cáncer en los adultos, las causas de la inmensa mayoría de los casos de cáncer infantil se desconocen.
El cáncer afecta a personas de todas las edades y puede surgir en cualquier parte del cuerpo. Empieza con un cambio genético en una sola célula, que luego prolifera hasta dar lugar a una masa o tumor que invade otras partes del organismo y, en ausencia de tratamiento, va causando cada vez más daños, hasta provocar la muerte.
Muchos estudios han tratado de determinar por qué surge el cáncer infantil, pero a edades tan cortas hay muy pocos cánceres que resulten de factores ambientales o del modo de vida.
No obstante la persistente interrogante sobre su origen, se ha encontrado que algunas infecciones crónicas, como las que se deben al VIH, el virus de Epstein-Barr o al parásito del paludismo, constituyen factores de riesgo de cáncer infantil, lo que se observa especialmente en los países de ingresos bajos o medios.
Hay otras infecciones que pueden elevar la probabilidad de que los niños padezcan cáncer en la edad adulta, por lo que es importante vacunarlos. Por ejemplo, la vacuna contra la hepatitis B previene el cáncer hepático y la inmunización contra el virus del papiloma humano previene el cáncer cervicouterino.
Según se desprende de los datos actuales, alrededor de un 10% de los niños que padecen cáncer tienen una predisposición de carácter genético. Es necesario investigar más a fondo para conocer los factores que influyen en la aparición de cáncer en los niños.
Cuando el cáncer infantil se detecta en una fase temprana es más probable que responda a un tratamiento adecuado, elevando así las probabilidades de sobrevivencia, reduciendo el sufrimiento y reduciendo los costos y la intensidad de la terapia.
Un diagnóstico temprano depende del conocimiento de los síntomas por parte de las familias y los profesionales de la atención primaria de salud; la precisión y puntualidad en la evaluación clínica, el diagnóstico y la determinación del estadio de la enfermedad; y el inicio rápido del tratamiento.
Generalmente, los síntomas detectables de alerta incluyen fiebre, dolor de cabeza intenso y persistente, dolores óseos o pérdida de peso. Las familias y profesionales de la atención primaria de salud debidamente formados pueden detectar estos síntomas.
La OMS destacó que, a la fecha, países de todos los niveles económicos han implantado con éxito programas para promover un diagnóstico precoz y correcto, a menudo mediante iniciativas de colaboración del gobierno con la sociedad civil, organizaciones no gubernamentales y asociaciones de padres.