La destacada bailarina y docente rojense, formada desde su infancia en Maikan Sumaj y hoy ya instalada en su carrera profesional, representará junto a Ulises Delbaldo a la Argentina en el DanzPare 2022, que arranca desde hoy y seguirá hasta el 17 de octubre.
«Me dedico a la danza desde muy chiquita, primero como un hobbie, en tanto ahora si bien lo sigo tomando de la misma manera, tuve la suerte de poder estudiar en Buenos Aires, en la Universidad Nacional de Arte, donde hice la licenciatura en folklore y tango, donde me pude recibir y luego continuar trabajando profesionalmente en el ámbito de los dos géneros”, relata en Radio Rojas la destacada bailarina y docente de danzas rojense Micaela Mazzucco. Micaela, formada desde su infancia en Maikan Sumaj y hoy ya instalada en su carrera profesional, representará junto a Ulises Delbaldo a la Argentina en el DanzPare 2022, que arranca desde hoy y seguirá hasta el 17 de octubre.
Al relatar en El Nuevo en Radio algunos momentos clave de su trayectoria artística, Micaela singulariza uno en especial: “Un trabajo muy importante para mi fue una ópera en la cual participé, montada en el Teatro Colón, donde trabajé como bailarina. Fue una experiencia inolvidable…”, evoca, en el aire de la FM92.5.
«Es inexplicable lo que se siente al salir al escenario del Teatro Colón, algo que siempre fue un sueño para mí. Es como que hasta el día de hoy que no logro caer, porque para alguien que baila el hecho de pisar ese Teatro es lo máximo, te sentías chiquita, son cosas imposibles de explicar las que te pasan por dentro. Fue algo muy hermoso», recuerda.
Pero también ha participado de otros proyectos importantes: “También tuve la posibilidad de integrar la compañía Tempo Tango con la dirección de Ignacio González Cano, donde también participaba Mariela Anchipi, también conocida como La Chipi en la televisión, un espacio en el cual pude aprender muchísimo y conocer lugares y escenarios muy lindos. Participé además del ballet folklórico Flor de Amancay, otro lugar donde aprendí mucho y pude vivir experiencias únicas», comenta.
Respecto de su presente, nos explica que “estoy volcada profesionalmente a la danza y a la docencia, aunque durante la pandemia me tuve que instalar más en Rojas, con lo cual encontré otra faceta de mi plano artístico que es la docencia. Es así que comencé a dar clases en Maikam Sumaj y en la Escuela de Estética».
Maikan, por cierto, es donde nació al mundo de la danza: “En Maikan me formé desde los 6 años bajo la dirección de Graciela Gallo que ahora es justamente la productora del DanzPare. Siempre estaré agradecida a Maikan porque me abrió las puertas a un montón de posibilidades y me enseñaron con mucho amor y cariño todo lo que sé».
En ese sentido, explica que “lo que tratamos en Maikan siempre es de trabajar un poco de todas las disciplinas, lo que es la técnica de la danza clásica, danzas modernas, danzas españolas, folklore, lo cual te va generando una formación más que importante, y sobre todo debo subrayar el hecho de haber estado siempre guiada por Graciela, que en cada momento hace notar la pasión que pone en cada trabajo, dejando todo, y puntualmente ahora con el DanzPare, donde hay muchos detalles que atender y estar al tanto de todo. Creo que sólo ella lo puede hacer ya que es un proyecto muy grande, donde vienen parejas de otros países y hay que ocuparse de todo, incluso de su movimiento, porque no solo habrá presentaciones en Rojas, sino que habrá talleres en otras ciudades»
A ese respecto, Micaela dice que “será un fin de semana muy movido, que arrancará el sábado en la Megaferia, el domingo estaremos en Santa Isabel, también en escuelas, pero será un evento muy lindo».
Al preguntarle sobre cómo vive ahora la experiencia de salir a los escenarios, a partir de la evolución de su trayectoria profesional, Micaela admite que “por más experiencia que puedas tener la adrenalina no se pierde nunca, y siempre se sigue aprendiendo, creo que eso es lo más lindo”.
“Además –agrega- es muy lindo vivir los preparativos, que seguramente son más estresantes que para otras presentaciones. De todos modos, ya está todo bastante organizado, desde lo que es la producción a los ensayos, buscando que todo esté diez puntos para el día del evento, porque sabemos que no se puede fallar en nada».
A ese respecto, precisa que “con Ulises vamos a estar haciendo un tango escenario, un tango vals y en danzas folklóricas vamos a estar haciendo una zamba, todo estilizado”.
Y señala que “lo que se trata de hacer en este evento es que cada pareja vaya haciendo una danza diferente por presentación, pero nosotros también formamos parte de lo que es el ballet del Maikan que estará haciendo la apertura y el cierre, por eso vamos a bailar con el ballet, después cambiarnos y salir a escena nosotros. Es intenso pero es algo que disfrutamos mucho».
En cuanto a su actividad profesional en la danza, nos cuenta que “en estos últimos tiempos estuve haciendo algunas cosas relacionadas a la danza ya que con mi compañero, que es de Córdoba, tratamos durante la pandemia de armar material y ahora estamos con un proyecto bastante encaminado que es un show de tango, y si todo sigue bien me iría un tiempo a las Cataratas del Iguazú a bailar al Casino».
Es que, indica, “en Buenos Aires hay muchas casas de tango que tienen su show armado con música en vivo y bailarines, y hay una casa puntual que es Madero Tango, que tiene una sucursal en Iguazú, con lo cual nos iríamos con el espectáculo para allí, algo que para mi sería como cumplir otro sueño, sobre todo porque nunca me había tocado vivir la experiencia de trabajar en una casa de tango, así que estoy muy ansiosa de que iniciemos con el trabajo».
Micaela aprovecha para explicar que “en el tango hay diferentes estilos como son el tango pista, que es lo que uno puede ver en una milonga, el tango puro, el que se sale a bailar, y después tenemos el tango escenario, que es donde uno se puede estilizar un poco más y agregar trucos y demás detalles”. A ese respecto, considera que “me encantan y me parece que son necesarias las dos versiones, porque por un lado tenemos la manera clásica que nos va mostrando las raíces de la danza, en tanto por otro lado la estilización va generando nuevas visiones, y va permitiendo que ese folklore sigue vivo y se pueda exportar a otros países”.
“Siempre hay como una ambigüedad en los conceptos, pero creo que es necesario para los bailarines y los músicos. Para los que trabajamos en el arte es muy bueno trabajar en las diferentes versiones, de hecho, en la facultad estudiamos las danzas tradicionales, conocemos la base, pero a su vez también se aprende a profundizar en las estilizaciones. En lo personal el tango escenario me gusta mucho porque ofrece la posibilidad de descubrir distintas variantes”, añade Micaela.
Justamente, nos dice, “hace muy poco terminó el Mundial de Tango, donde está bien marcado lo que es tango pista y tango escenario, y lo que se ve en cada espectáculo de estas características es la fuerza que ha ido tomando en todo el mundo el tango, la gente se enloquece y se ve cautivada. Pero te puedo asegurar que no solo pasa con el tango, sino también con otras danzas argentinas también, como por ejemplo el malambo. La danza argentina es muy bien vista en todos lados. En el tango escenario, cuando uno más estilos tiene incorporados en su danza va ayudando a que luego se vea algo que asombre, incluso viendo a alguien en tanto pista quedás asombrado de las destrezas”.
Respecto de las influencias en el mundo de la danza, nos comenta que “tengo muchos bailarines que me han impactado a lo largo de mi vida, sobre todo quienes abrieron el campo de la danza, como por ejemplo el Chúcaro. También hay muchos bailarines actuales de tango que no son tan famosos, pero hay parejas puntuales de las cuales miro sus videos y no dejo de sorprenderme, y de eso voy aprendiendo un montón, lo mismo me pasa con los bailarines del ballet nacional. Una pareja de tango que en lo personal me vuela la cabeza son Camila y Ezequiel, que son ganadores del mundial de tango, y Ezequiel justamente es de Pergamino».
Pero, ¿qué observa un bailarín profesional cuando mira el trabajo de un colega? “Lo que voy observando depende mucho de lo que hace la pareja, porque hay parejas que tienen mucha técnica y son buenísimas, mientras que hay otras que no tienen tanta técnica, pero cuentan con una enorme velocidad y es muy bello también. Por otros lados hay parejas que expresan un montón al bailar, y lo que trato en mi caso es de tener un poco de técnica, otro de velocidad y además expresar. Por eso voy mirando de todo y trabajando al mismo tiempo para crecer».
En cuanto a su presentación en el DanzPare junto a Ulises Delbaldo, nos cuenta que “con Ulises somos compañeros y amigos desde hace un montón de tiempo, viajamos juntos a Francia cuando se hizo la gira (de Maikan) en el 2017, y en el ultimo tiempo que estuve viviendo acá los dos teníamos ganas de movernos y nos pusimos de acuerdo para retomar, fuimos armando nuevamente las coreografías y nos llevamos muy bien, hasta que llegó la oportunidad del DanzPare, donde vamos a mostrar todo lo que hemos trabajado. Hemos tenido la chance de presentarnos en el café concert de la Agrupación Coral, y seguramente seguiremos mostrando nuestro trabajo cada vez que nos convoquen».
Esto la lleva a reflexionar que “cuando uno tiene buena relación es más fácil y por suerte con todos mis compañeros tengo mucha afinidad, los conozco mucho y con una mirada sabemos lo que tenemos que hacer. Incluso cuando se comete algún error, cuestión que, cuando pasa en el tango, al ser de a dos, tenés una manera rápida de salir, y lo mismo pasa en el folklore».
En cuanto al fantasma tan temido de los bailarines profesionales, que son las lesiones, Micaela dice que “me ha pasado de tener lesiones, por suerte no fueron series, siempre alguna lesión en la rodilla, en la cadera, que con un descanso se curan. Muchas veces pueden ocurrir cuando estás muy cansada o pasada de vueltas como se dice habitualmente». Por ello, agrega, “trato siempre de comer saludable y me mantengo en forma con las clases. De todos modos me gusta también hacer ejercicios como pilates o salir a caminar, pero no es que llevo una dieta o algo estricto, con eso siempre me pude mantener tranquila».
Finalmente, Micaela nos contó que “lo más próximo que tengo es lo de Iguazú, y en mi plan de vida la idea es hacerlo a través de la danza, por un lado con la docencia, pero mientras tanto poder aprovechar el cuerpo al máximo porque la carrera del bailarín como la de cierto tipo de deportista tiene vencimiento. Se que no es fácil vivir del arte en nuestro país, pero lo voy a seguir intentando porque ese es mi sueño…»
