Los aumentos de las tarifas de luz que se iniciaron en febrero pasado permitieron reducir 30% el dinero que el Estado nacional debe destinar a mantener el sistema eléctrico.
Según datos de la Confederación Argentina de Trabajadores y Empleados de los Hidrocarburos, Energía, Combustibles, Derivados y Afines (CATHEDA), el Estado nacional destinó $263.962 millones para subsidiar el costo del sistema energético nacional en febrero, lo que representa el 48% del valor total.
Según el informe de la entidad, el costo del sistema energético trepó a febrero a $554.920 millones, similar al de enero, donde el subsidio había sido del 78%.
El costo del sistema energético aumentó en febrero de este año un 266% en forma interanual, mientras que el pago de subsidios lo hizo en 236%. La diferencia obedece al aumento de tarifas que cubrió parte del aumento de costos.
El Gobierno busca durante 2024 reducir en forma sustantiva los subsidios energéticos como herramienta base para alcanzar el equilibrio fiscal.
En esa línea, la semana pasada aplicó un nuevo aumento que redundará en una reducción de 0,3 puntos del PBI el costo de subsidiar la energía.
De todas maneras, el Estado mantiene con CAMMESA la empresa que maneja el sistema eléctrico, una deuda de unos $2 billones que, según trascendió, sería saldada con un bono.