Javier Milei ratificó que no tiene intenciones devaluar y despotricó contra los legisladores que votaron a favor de la reforma en la movilidad jubilatoria.
Desde República Checa y alejado de la agenda nacional, el presidente argentino Javier Milei ratificó que no tiene intenciones de impulsar una devaluación y consideró que los legisladores que votaron a favor de la reforma en la movilidad jubilatoria intentaron un “golpe desestabilización” que buscaba “romper con el equilibrio fiscal”.
“El problema argentino no es un problema monetario, es un problema de competitividad, es un problema real” señaló el Jefe de Estado, que no se encuentra en el país desde el pasado 21 de junio y volvería a Argentina el próximo martes, y agregó que “eso no se arregla devaluando”.
En esta línea, Milei aseguró que “hay sectores que les conviene que haya salarios en dólares bajos, más pobres y más indigentes” de los cuales se diferenció al asegurar que él “cree que funciona desde otra manera la situación”, pero evitó dar precisiones al respecto.
Asimismo, el Presidente señaló que el dólar tuvo una suba en su precio producto de la decisión de los diputados nacionales de aprobar la reforma jubilatoria, que apunta a mejorar la situación económica de un sector de la población, pero que Milei ya avisó que vetará la reglamentación si el debate en el Senado sufre la misma suerte.
“El dólar no saltó por un problema de índole monetaria o por un problema del mercado de cambios, sino que el dólar saltó porque se contaminó e precio de los bonos con el accionar de estos diputados irresponsables”, fustigó el Jefe de Estado en declaraciones radiales.