Un operativo en La Salada.
Luego de casi tres semanas con reuniones entre la Justicia, los diversos gobiernos y los feriantes, los tres predios que componen La Salada en el partido bonaerense de Lomas de Zamora, la feria está en condiciones de reabrir sus puertas. Así lo hizo saber la fiscal de la causa, Cecilia Incardona, que le elevó el pedido al juez Luis Armella.
Tanto el intendente local Federico Otermín como las autoridades de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) y los propios feriantes que cumplieron con los requisitos establecidos por la fiscal, que investiga la megaferia por los delitos de asociación ilícita, lavado de dinero y evasión impositiva. También la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) participó de las reuniones y puso sus condiciones.
La funcionaria, tras una larga serie de condiciones que apuntan al blanqueo general de las operaciones y las fiscalizaciones que los agentes recaudatorios realizarán allí, le pasó “la pelota” al juez, quien debe ratificar la apertura del lugar.
En las últimas horas, algunos feriantes optaron por vender en las inmediaciones del complejo de Lomas de Zamora, en las calles de la zona, con carteles y perchas con las cuales ofrecen los productos. Es que el cierre, a raíz de la detención de Jorge Castillo, más conocido como “El Rey de La Salada” y luego de más de 60 allanamientos, se extendió más de lo previsto.
El último foco de tensión se produjo en las primeras horas del lunes, cuando las fuerzas de seguridad se llevaron prendas supuestamente con logos truchos de primeras marcas, versión que los feriantes desmintieron.
Actualmente, el predio tiene tres grandes establecimientos con más de 8.000 puestos y le da trabajo a más de 30.000 familias que pagan cerca de 180.000 pesos por día para vender sus productos. Algunos son truchos y cuestionados por las grandes marcas, mientras que otros provienen directos de fábrica o son de producción propia. (DIB)
