El periodista rosarino Rodrigo Miró, especialista en investigaciones sobre narcotráfico, aseguró que una o dos avionetas vinculadas al tráfico de drogas aterrizan semanalmente en la región. En diálogo con Lilí Berardi en el programa Sin Galera, explicó que, dentro del esquema narco actual, las aeronaves se abandonan tras cumplir su función porque son consideradas parte del costo operativo.
Miró recordó que en el Aeroclub de San Pedro permanece secuestrada desde hace cuatro años una avioneta propiedad de un empresario entrerriano acusado de narcotráfico, y señaló que la presencia de este tipo de aviones es cada vez más frecuente en el norte bonaerense, el sur de Santa Fe y zonas cercanas de Entre Ríos.
Entre los casos más resonantes, mencionó el de Jade Isabela Calláu Barriga, ex Reina de Belleza de Bolivia, quien fue condenada y expulsada del país tras un aterrizaje de emergencia en Entre Ríos, donde su aeronave —con matrícula falsificada— transportaba 350 kilos de cocaína con destino a la provincia de Buenos Aires.
Avionetas descartables
El periodista reveló además la existencia de un piloto peruano que operaba en Buenos Aires una supuesta “escuela de aviación” para pilotos narco, con simuladores de vuelo ocultos detrás de un local bailable.
Según Miró, las avionetas utilizadas en el tráfico se adquieren a precios muy bajos —algunas por apenas 13 mil dólares— frente a los valores del mercado formal, y luego son descartadas, incendiadas o desarmadas.
Finalmente, subrayó la importancia estratégica de la zona:
“La sospecha es que una o dos veces por semana una avioneta narco aterriza en campos de San Pedro, Pergamino, San Nicolás o el Gran Rosario”.
El negocio resulta altamente rentable: un kilo de cocaína que en Bolivia cuesta unos 1.500 dólares, puede multiplicar su valor entre 20 y 50 veces al llegar a destino, detalló el periodista. (InfoGEI)Ac