La investigación en Argentina está a cargo de la jueza federal, Arroyo Salgado, llevada adelante con personal de la Policía Federal – Hubo más de cuarenta allanamientos – Se logró desentramar un elaborado sistema de operaciones dinerarias “con poderes certificados por notarios de confianza del núcleo criminal”, según se informó
Como es de público conocimiento se realizaron hace algunos días en una escribanía de calle María Unzué de Alvear y otros domicilios de nuestra ciudad, una serie de procedimientos a cargo de Policía Federal, relacionados a una causa internacional que en Argentina lleva adelante la jueza federal Arroyo Salgado, a partir de una investigación originada tras una denuncia formulada por la Procuraduría de Criminalidad Económica y el Lavado de Activos (PROCELAC), que alertó sobre transferencias millonarias de fondos por intermedio de activos criptográficos comúnmente denominados “criptomonedas”, y activos fiduciarios, resultando atribuídas tales maniobras a una persona de nacionalidad brasileña y su núcleo familiar.
Según la información que comenzó a trascender en medios nacionales, la investigación estableció determinaron que el denunciado M.C.S. y su pareja, N.P.D., habían estado fuertemente involucrados, hace unos años, en maniobras de lavado de activos en la República Federativa de Brasil. En primera instancia, estas personas aparecían como propietarios de una entidad de asesoría financiera de Brasilia, empresa esta que promocionaba trasladar jóvenes universitarios a fin de estudiar en Argentina, moviendo por medio de este mecanismo comercial sumas millonarias en reales vinculadas a la organización narcocriminal identificada como Comando Vermelho.
La justicia brasileña, a través del Juzgado Especializado en Crimen Organizado, efectivizo órdenes de detención y allanamientos, bloqueando cuentas por la suma de 681 millones de reales y embargo de bienes muebles e inmuebles, estableciendo que las empresas involucradas lavaban dinero mediante la utilización de criptomonedas (activos digitales) no consiguiendo efectuar el rastreo de tales fondos.
Dentro de las personas denunciadas se hallaban M.C.S., su esposa N.P.D., y otras tres personas también de nacionalidad brasileña, sindicados en esta trama criminal como parte del grupo delictivo, algunos de ellos con antecedentes por hechos similares en octubre de 2019 en Brasil, por haber recibido depósitos bancarios en una cuenta del Banco Bradesco, del municipio de São Gonçalo, Rio de Janeiro, luego transferidos a otras dos sociedades, siendo los fondos procedentes del tráfico de drogas en la comunidad de Brejal, situada en el Complexo do Salgueiro, dominado por la organización Comando Vermelho.
La acción dirigida por la Fiscalía Federal N° 2, de San Isidro a cargo del Dr. Fernando Domínguez, ante el Juzgado Federal N°1 de San Isidro a cargo de la Dra. Sandra Arroyo Salgado, Secretaria N° 1 a cargo de la Dra. Agustina Daus, se concentró en determinar las acciones que se encontraba desplegando en nuestro país el grupo liderado por M.C.S. logrando desentramar un elaborado sistema de operaciones dinerarias sin un marco legal o comercial registrado, que oficie como aval de las sumas millonarias que eran introducidas en el circuito comercial de nuestro país.
Estas acciones consistían fundamentalmente en depósitos, transferencias, cambio de divisas, créditos mutuos y operatorias con poderes certificados por notarios de confianza del núcleo criminal.
Con estas herramientas legales el cabecilla de la organización (alias “El Negro” o “El Jefe”), autorizaba a operar en su nombre a los comúnmente denominados “testaferros o prestanombre”, tanto en temas administrativos como en aspectos civiles: compra venta de bienes muebles, como autos, e inmuebles, tales como empresas, viviendas, terrenos, etc., alejando de esta forma su responsabilidad sobre el patrimonio, sin dejar de ser su dueño.
Bajo estos parámetros, el despliegue investigativo del personal del Departamento Operaciones Contra el Lavado de Activos y Financiamiento del Narcotráfico de la Policía Federal Argentina, consistió primero en diversificar sus tareas para lograr en primera instancia la individualización y funciones de todos los componentes de esta estructura.
Además de lograrse la detención tres de los principales involucrados, se materializó también el secuestro de más de $65.000.000 de pesos, u$s 160.000 dólares, 25.000 euros, R 30.000 reales, 1.500 francos suizos, seis vehículos de alta gama, armas de fuego, teléfonos celulares, diversos elementos de computación para realizar las maniobras y una importante cantidad de documentación de vital interés.
Además por disposición judicial se procedió a trabar embargo en todas las cuentas bancarias, inhibición de todos los bienes, congelamiento y bloqueo de cuentas de criptomonedas de más de 22 personas, como así también se dispuso la clausura de seis oficinas ubicadas en el microcentro porteño utilizadas para el intercambio ilícito de cryptoactivos y/o divisas extranjeras.
Como corolario de la tarea desarrollada en la innovación de la figura procesal del “agente revelador”, se consiguió con éxito, la obtención de direcciones de varias billeteras virtuales que permitieron en primer instancia el secuestro instantáneo de más de u$s 50.000 dólares y el rastreo de otras cuentas y subcuentas vinculadas, con sumas millonarias, lográndose con este accionar innovador sentar precedentes en la materia, en el plano nacional.
Se prosigue con el análisis de la documentación secuestrada no descartándose que en las próximas horas se podrán realizar nuevos allanamientos.