De esta forma, el IC acumula en los primeros tres meses del año un decrecimiento de 3,1%, marcando un profundo deterioro en el consumo al inicio del 2024. “Continúa la tendencia bajista en las tasas de crecimiento interanual exhibidas por el IC a partir de enero y marcan en marzo 2024 un nuevo valor negativo en el año”, indica el informe de la CAC.
Esto se da en un escenario económico donde la inflación se está desacelerando y está cerca de dejar atrás las variaciones mensuales de dos dígitos. En marzo 2024 la mensual fue de 11,0%, con una interanual de 287,9% y una acumulada anual de 51,6%.
“Los significativos incrementos en los precios de bienes regulados, especialmente en sectores como educación y tarifas de servicios públicos como la electricidad, han contribuido a una inflación mensual considerable. Esto resultó en una continua disminución del ingreso real de los hogares, erosionando su poder adquisitivo”, señalan en el informe.
Y continúan: “Dado que estos rubros son de consumo inevitable, la situación se torna aún más desafiante para los hogares. En el proceso de ordenar los precios relativos, el consumo está siendo la variable de ajuste por parte de las familias. Los postergados aumentos en las tarifas de gas y transporte públicos tendrán un rol clave en las tasas de inflación de los próximos meses y, por tanto, en el consumo. La implementación de una política de ingresos que busque recomponer el consumo, pero sin volver a acelerar la inflación, será una difícil tarea que tendrá el gobierno nacional por delante”.
Al analizar el desempeño de algunos rubros en particular, se observa una dinámica generalizada de decrecimiento interanual respecto a los valores de marzo de 2023.
El rubro de indumentaria y calzado mostró en el tercer mes del año un decrecimiento estimado de 11,2%. “Se explica por la gran caída del ingreso de los hogares y la postergación de consumos no fundamentales para la vida cotidiana”, indica el informe.
Por otro lado, el capítulo de transporte y vehículos mostró un retroceso estimado del 4% en marzo, contribuyendo negativamente en un 0,5% a la variación interanual del IC. La disminución se explica por una fuerte caída de los patentamientos de automóviles y un leve encarecimiento del precio de la nafta.
Recreación y cultura mostró en marzo un decrecimiento de 14,5%. “Esto se explica por las mismas razones que el segmento indumentaria y calzado: la caída en el ingreso real redujo el poder de compra y postergó el acceso a bienes y servicios relacionados al ocio”.
En cuanto al apartado de vivienda, alquileres y servicios públicos, este mostró un retroceso estimado de 9,9% en marzo “por la disminución en el ingreso disponible y el gran aumento en las tarifas de electricidad”. (DIB)