Es el Hospital San Bernardo (HSB), de máxima complejidad y el más importante de la provincia de Salta, el que dispuso una serie de recortes en las prestaciones sanitarias, como la suspensión de cirugías programadas y de turnos, limitaciones en la entrega de medicamentos, entre otras que afectarán el acceso a la salud de la población, y que puso en alerta a la provincia.
Según el comunicado interno que alcanzó difusión pública por las redes sociales, las medidas fueron dispuestas por el «Comité de Emergencia Económica» que conformó la institución en el marco de la situación de crisis en la que se encuentra la provincia y el país a partir de los ajustes implementados por el presidente Javier Milei.
En ese marco, Salta afronta un período de anunciada «estanflación» con el presupuesto de 2023.
El Hospital San Bernardo es de máxima complejidad para personas adultas y el más importante de la provincia ya que asiste a pacientes de la Capital y de las localidades del interior, incluso de las provincias y países limítrofes.
Según dio a conocer el gobierno provincial el año pasado, la institución brinda servicios a un promedio de 1.000 usuarios por día, de los cuáles 700 se atienden por consultorio externo y 300 ingresan a a través del servicio de guardia de emergencia; además tiene 405 camas para internaciones.
En un comunicado interno, que luego trascendió al público, el 17 de enero último el equipo gerencial informó a su personal las medidas que recortan las prestaciones sanitarias.
El Hospital San Bernardo (HSB), el de máxima complejidad y más importante de la provincia de Salta, dispuso una serie de recortes en las prestaciones sanitarias que preocupa a la población.
El Hospital San Bernardo (HSB), el de máxima complejidad y más importante de la provincia de Salta, dispuso una serie de recortes en las prestaciones sanitarias que preocupa a la población.
Se suspendieron las cirugías programadas consideradas «no prioritarias» por falta de insumos. Se estableció mantener la agenda de ayer jueves, pero «solicitar a los pacientes la provisión de 6 electrodos de monitoreo cardíaco».
En tanto, los pasos a seguir dependían de lo que surja «en reunión» el mismo jueves con el Ministerio de Salud Pública de la provincia, a cargo de Federico Mangione, quien hoy atenderá a la prensa y hablará sobre la situación sanitaria en la provincia.
Aunque en el comunicado interno se le pide al personal de salud «colaboración» para «optimizar el uso de insumos y recursos a fin de mantener las prestaciones a la comunidad», los recortes afectarán el derecho al acceso a la salud de los usuarios y las usuarias del sistema público.
El ajuste incluye limitaciones para las prestaciones de los estudios médicos, «no se realizarán exámenes complementarios a pacientes que no cuenten con historia clínica en el HSB ni con el registro de la atención donde se solicitó dicha práctica», sostiene. Además se reducirá la atención de turnos programados en consultorios externos.
También se limita la entrega de medicamentos. La Farmacia Central del Hospital dejará de entregar medicación para tratar patologías crónicas a pacientes ambulatorios, por lo que los pacientes tendrán que presentar la receta en el Centro de Salud correspondiente a su domicilio o a la oficina de gestión de pacientes de la cartera de Salud.
Respecto a pacientes que son dados de alta de la internación, el comunicado detalla que «se les proveerá medicación para cubrir el tratamiento (por) 48 horas». En ese caso, el médico a cargo deberá confeccionar dos recetas: una que cubra la medicación por 48 horas, que deberá entregarse en la farmacia del hospital, y otra sobre el resto del tratamiento pero que deberá presentarse en el Centro de Salud correspondiente o a gestión de pacientes del Ministerio de Salud Pública.
El gran problema es que en los centros de salud e incluso los hospitales del interior provincial tampoco se consiguen algunos medicamentos y en estos últimos días en redes sociales se pueden ver pedidos de donación precisamente porque la gente no estaba accediendo a los remedios en el sistema público y no tiene recursos para comprarlos.
Un informe del Centro de Profesionales Farmacéuticos Argentinos indicó que entre enero y diciembre de 2023 los precios de los remedios más usados aumentaron 319,1%.
Además, el Hospital San Bernardo informó a su personal que generará un instructivo de uso del sistema para la visualización de los resultados de las determinaciones de laboratorio para las y los profesionales médicos con el fin de evitar reiteraciones en solicitudes de análisis. «Actualmente se repiten pedidos de análisis constantemente, lo cual genera pérdida de eficiencia operativa y mayores costos», sostiene el comunicado.
Por último, la institución agradeció la «comprensión» y solicitó «colaboración en este complejo contexto económico que nos toca atravesar».
También el Hospital Materno Infantil, que asiste a niños, niñas y adolescentes de toda la provincia, dispuso recortes desde el 11 de enero último. Mediante el memorandum interno 129/24, el presidente del directorio, Esteban Rusinek, comunicó que «por el quiebre de stock, se suspenden las cirugías programadas de las áreas pediátricas y perinatológicas».