La concejala por Juntos, que va por su relección en la lista de Román Bouvier, pasó por los estudios de Radio Rojas y habló a agenda abierta sobre la gestión del municipio, su trabajo como edil y las perspectivas políticas y generales en el marco de las PASO
María José Ojeda, concejala por Juntos, que va por su relección en la lista de Román Bouvier, pasó por los estudios de Radio Rojas y habló a agenda abierta sobre la gestión del municipio, su trabajo como edil y las perspectivas políticas y generales en el marco de las PASO.
“En estos días que hemos recorrido las calles uno va recibiendo de todo: quejas, reclamos, pedidos; pero también palabras de aliento, aunque es innegable que hay sectores de la comunidad que tienen necesidades marcadas”, comentó en El Nuevo en Radio, respecto de lo que observaba en sus recorridas junto al equipo de Bouvier.
En se sentido, aseveró que “es mucho lo que se hace a diario, es muy amplio el trabajo de todas las áreas del municipio, pero Román ha recibido a todas las instituciones, a mucha gente particular, porque se trata de dar respuestas a todos, en mayor o menor medida, e incluso si no se puede resolver una situación por completo se busca dar una mano, intervenir y realizar acciones conjuntas para resolver lo más que se puede”.
Para ello, puntualizó, “lo que veo es que hay un equipo de trabajo y que se han ordenado muchas acciones, más allá de que a Román le tocó subir a un tren que ya estaba en movimiento y había cuestiones que ya estaban planteadas desde antes de su llegada, y funcionarios que estaban en la gestión desde hacía tiempo. En ese marco él pudo elegir algunas personas para sumar, creo que ese orden se ha ido logrando, y en esa impronta que le ha puesto a la gestión todo se ha ido retroalimentando. Cuando algo funciona cada uno se va motivando y tratando de que todo salga mejor, lo que a su vez sirve para generar cosas nuevas, porque no se trata de andar con grandilocuencias, cuando solo se trata de ordenar lo que se gestiona y lo que se hace a diario”
-¿Cuándo ingresás al Concejo?
-Ingresé al concejo el 10 de diciembre del 2019. Es una función que me gusta, más allá de que no venía del ámbito de la política, sino que estaba en mi ámbito profesional e institucional, que por supuesto tiene algo de política, pero uno gestiona desde otro espacio y a través de otras acciones. La actividad institucional también es gestión y negociación constante, pero en este caso uno está en otro lugar, ya desde el plano público, que también es atrapante. Mi interés en participar está dentro de mi vocación, y a medida que uno está dentro de la función pública nos vamos apasionando, porque no hay manera de llevarlo adelante si no está la pasión. Solo tengo una ausencia a sesión, algo que puedo señalar con orgullo y también con respeto, porque los concejales no tenemos dedicación funcional, pero sí tenemos la obligación de estar presentes en las dos sesiones mensuales que nos corresponden por reglamento, y la obligación de participar en las reuniones de las comisiones, lo cual se merece todo el respeto.
-Sos licenciada en Trabajo Social…
-Si. Primero había elegido otra profesión, pero me di cuenta que no era lo que quería hacer todos los días y fui por el camino de lo social por muchas cuestiones que evalué en ese momento. También tuve una madre docente que me inculcó muchas cuestiones que tienen que ver justamente con lo social y eso tuvo una gran influencia en mí. Después aparecen los temas que uno ve a diario y que lo atrapan, y considero que se puede participar. A nivel profesional tuve mi primer trabajo en la Escuela 15 en el 2003, unos días después de que había ocurrido lo de la shigella, en una escuela donde había muchas licencias, chicos que todavía estaban con cuestiones relacionada a esa situación, con Marta Farella de directora, de quien aprendí mucho. Es un paso del cual rescato muchísimo, dentro de una comunidad que me recibió muy bien, y siento que a través del tiempo sigo capitalizando aquellas experiencias.
-Sos parte del núcleo original del Centro de Día…
-Una vez Rosa Albamonte me llamó, me contó la idea que tenía, que ya había hablado con Daniela Amichetti y Marilina Choulet. Yo las escuchaba hablar y realmente no sabía si todo lo que tenían proyectado podía ir para adelante, pero se ordenaron todas las ideas y en muy poco tiempo surgió el Centro de Día. Ya pasaron veinte años, y se me infla el corazón cuando veo que sigue en pie. Aún sigo creyendo que fuimos unas arriesgadas cuando se puso en funcionamiento, y eso me enorgullece más aún, porque era un equipo que no claudicó nunca, y que también entendió que las instituciones trascienden a las personas, porque fueron cambiando los equipos y todo continúa en pie.
-¿Cambió la mirada social hoy sobre la discapacidad y la inclusión?
-Pusimos en ese entonces a la vista de la sociedad un tema que hasta ese momento era bastante tabú, pero considero que todavía falta camino por recorrer, porque instituciones como la Escuela Especial, el Taller Protegido o el Centro de Día siguen estando en la periferia no sólo por su ubicación física, sino también respecto de la mirada de la comunidad. Por eso había que poner en el centro de la escena la discapacidad: cruzarte con un pibe en silla de ruedas, que la persona con dificultad en la comunicación venda una tarjeta de estacionamiento, que puedan participar de la vida en comunidad, creo que fue todo un logro. No tengo dudas de que enfrentarse a la discapacidad es enfrentarnos a nuestras propias limitaciones, más que a las de las personas supuestamente limitadas.
-En estos días tuvieron que ocuparse de un tema agobiante para la comunidad, como lo fueron los aumentos de electricidad…
-El tema del aumento de luz es el tema principal de los pedidos de la gente, es algo que comenzó hace una semana y la gente sigue yendo desde el asombro a la angustia, pasando por diferentes situaciones de enojo, de bronca. Lo preocupante es la angustia del que sabe que no va a llegar, es una situación terrible que atraviesa a toda la comunidad. En este marco elevamos un pedido de informe a la Cooperativa, que tiene las facultades de ejecutar el aumento de acuerdo a las medidas de provincia y nación, pero en definitiva es la Cooperativa la que dice cuánto se aumenta, porque sabemos que hay un margen, se puede aumentar desde tanto por ciento hasta tanto por ciento. Entonces queremos saber con qué criterio se elige cuánto aumentar y cuál es ese porcentaje que aumenta. Por otro lado lo que pedimos es que desglosen la factura porque es realmente indescifrable, ya que no sabemos de qué se tratan algunos ítems.
-¿En qué otros temas se están ocupando estos días?
-Tenemos pendientes reuniones con el secretario Vial, que tiene la propuesta de realizar algunas modificaciones para poder movilizar la participación de los productores y estamos trabajando en eso, con la idea de volver a convocar al Consejo Asesor Municipal porque puede ser muy importante ese aporte. También hay temas relacionados con la educación, que son cuestiones que surgen en las escuelas y los chicos nos acercan los proyectos. De hecho el año pasado tuvimos una experiencia muy linda con los chicos de la Escuela 5 de Los Indios y este año repitieron la acción y nos trajeron un proyecto para ponerle el nombre a las calles de la localidad. Nos parece muy importante que los chicos participen de estas prácticas de educación ciudadana, y también de prácticas legislativas en el aula, que les permite aprender sobre estas cuestiones que tienen que ver con el ordenamiento de la comunidad y la convivencia, pero sobre todo con la experiencia que significa para los chicos esa participación, y para nosotros el ejercicio de educación de nuestra comunidad, porque también nos interesa participar en esta clase de proyectos, con procesos muy interesantes. Otro tema para la próxima sesión será dar tratamiento al convenio que tenemos con la provincia por la construcción del SUM en barrio Evita, para el cual están los fondos, está el convenio, y falta el paso por el Concejo porque hay una oferta única en la licitación y tenemos que analizarla.
