Pero la llegada del invierno, donde las facturas pueden quintuplicarse solo por el mayor consumo, llevó a Energía a pensar en un nuevo esquema.
Tras la definición de las tarifas de electricidad, ahora la Secretaría de Energía trabaja sobre el futuro de las facturas de gas, que podrían tener un diseño distinto al actual, con la introducción de lo que se denomina como tarifa plana.
En este esquema, la boleta podría tener un componente mucho más importante del cargo fijo que del variable, por lo que se mantendría similar a lo largo del año, y no con bruscas variaciones por estación.
El objetivo del Ministerio de Economía es contener el impacto que tendrá en los consumidores los incrementos que se vienen, en un momento donde se acerca el invierno y ya las facturas pueden hasta quintuplicarse solamente por el mayor consumo. Además, es un guiño a las empresas energéticas para que aumenten las inversiones.
Cómo será la tarifa plana
Según pudo averiguar, hay dos formas en las que podría aplicarse la tarifa plana. Una es establecer el promedio histórico de metros cúbicos que consume un hogar durante el año, y dividirlo por los 12 meses del año. El ente que regula a las distribuidoras (ENARGAS) cuenta con esa información, al igual que las empresas.
El otro esquema, que suena más fuerte por estos días, es aplicarle un fuerte incremento al componente del cargo fijo que viene en la boleta, tal como ocurrió en electricidad. Esto podría implicar menor estacionalidad en el consumo. El otro es el cargo variable según los metros cúbicos utilizados, que buscarían que sea menos relevante. «Sino, los aumentos que se van a venir pueden ser muy importantes, este sería un esquema racional», describieron en una empresa.
Actualmente, hasta los usuarios del nivel 1 de altos ingresos reciben subsidios. En promedio en argentina, las familias pagan por el gas 0,4 dólares, cuando la totalidad es 4,3 por millón de BTU. El resto son subsidios.
Por lo que el retiro del Estado, y la convalidación de los pedidos de las distribuidoras y transportistas, que solicitaron actualizaciones en torno al 500%, hubiera implicado un golpe muy fuerte a las familias, en un contexto de elevada inflación, pérdida de poder adquisitivo y de cara al momento de mayor consumo.
Ventajas y desventajas de la tarifa plana
Alejandro Einstoss, uno de los mayores expertos en materia tarifaria, que había trabajado en una propuesta similar para el gobierno de Cambiemos, detalló las ventajas de este diseño: «A una familia le otorga previsibilidad y le da certidumbre en su presupuesto mensual, mientras que a las empresas les da una estabilidad en el flujo de los fondos».
En diálogo con este diario, también remarcó una desventaja, pero que puede corregirse: «Se podría pensar que al haber una tarifa plana no presenta incentivos para el uso eficiente de la energía y así consumir menos. En otros países, como en España, esto se contempla y se establecen premios y castigos para cuando hay desvíos con respecto a los consumos pasados».