La terapista ocupacional y coordinadora del Taller Protegido destacó la felicidad que causó en los operarios y en los chicos del Centro de Día la jornada que compartieron días atrás en el campo recreativo. Habló del presente de la entidad y anunció que comenzaron a vender pizzetas.
El campo recreativo CECIR, que se presentó en inmejorables condiciones a lo largo del verano, fue el lugar ideal para lo que fue una actividad que llenó de felicidad a cada uno de los protagonistas, nos referimos a la jornada que compartieron días atrás los operarios del Taller Protegido y los chicos que conforman el Centro de Día, todos acompañados por las respectivas autoridades y docentes.
Las imágenes que publicamos en el curso de la semana hablaron por sí solas de la alegría que significó para ambos grupos haber compartido una jornada extraordinaria, donde hubo juegos y mucha diversión.
Los operarios del Taller Protegido y los chicos del Centro de Día Sueños de Vida llegaron al CECIR junto a las docentes, profesores y acompañantes para disfrutar de una mañana a pleno, con un clima que se comportó de la mejor manera para la ocasión.
Para conocer más detalles de la jornada que vivieron los operarios del Taller Protegido y los chicos del Centro de Día fue que dialogamos en Radio Rojas con la terapista ocupacional y coordinadora del Taller Carolina Olivera, la cual destacó que “fue un día increíble para los chicos y para nosotros como responsables, algo que surgió por el equipo profesional de ambas instituciones para hacer una jornada distendida y cerrar con lo que fueron las jornadas de verano, para luego dar inicio en cada institución a las jornadas completas».
«Los chicos estuvieron felices porque pudieron compartir un desayuno, también el almuerzo, y en el medio lo que hicieron fueron actividades que habían sido programadas por los equipos profesionales», sostuvo.
La coordinadora del Taller Protegido subrayó que «lo bueno es que fuimos un montón, por ejemplo del taller fueron 32 chicos y del Centro de Díaz diez con lo cual tuvimos que dividirlos en grupos y se planificaron actividades de juegos con pelota, baile, incluirlos con la naturaleza, vivimos un día fantástico, además nos encontramos con un predio fantástico y le agradecemos al municipio que nos prestó el espacio, así que utilizamos la parte de las parrillas donde hicimos el desayuno y el almuerzo, además de estar en contacto con la naturaleza».
Pasando a las novedades de la entidad indicó que «a partir de esta semana comenzamos con el horario extendido, de 8 de la mañana a 4 de la tarde, donde los operarios tienen la jornada laboral por la mañana, luego tienen el almuerzo y después siguen con los talleres más el espacio recreativo que pensamos para ellos, con un parte más distendida, con el fin de que se puedan conectar desde lo social, que tengan otro tipo de vínculo para que no sea solo el laboral».
«En cuanto a lo que es la parte laboral y de producción seguimos con la venta de tarjetas en el estacionamiento medido, seguimos con la huerta y las bolsitas, y ahora vamos a empezar a incorporar por pedidos pizzetas, y en ese sentido nos estamos preparando con los chicos porque toda incorporación de productos requiere de un aprendizaje para ellos, de tiempos, vamos a ir de a poquito, así que invitamos a la comunidad de Rojas a colaborar desde ese lado, y si ven a los chicos o nosotros, también a Heber que anda por todos lados pueden hacernos los pedidos, o a través de las redes sociales, lo que nos permitiría tener un ingreso más para el taller que es tan importante», indicó.
En este plano señaló que “por suerte con lo que es estacionamiento medido y la huerta venimos muy bien con los ingresos, precisamente con eso es con lo que se sustenta lamentablemente el taller, y lo digo de esta manera porque entendemos que la situación económica en general es muy difícil y acá sostenemos cada vez más operarios, lo que significa que son más bocas para alimentar, y todo eso requiere de dinero para seguir llevando adelante el taller.
Lo bueno es que el ingreso económico tanto del estacionamiento, de huerta y demás es importante, pero tenemos que ir anexando productos como en el caso de las pizzetas para seguir generando ingresos y que el sostenimiento sea menos complicado, por eso es que siempre estamos pidiendo la colaboración a la comunidad».
Carolina Olivera se refirió a como viene funcionando el Taller desde la parte económica: «Tenemos colaboración por parte de becas y peculios que van a los operarios por parte de nación y provincia, y también tenemos una beca por parte de nación para sostener en parte los gastos fijos de la institución, de todos modos esa ayuda es muy precaria al lado de la demanda que tiene hoy el taller, por eso siempre estamos tratando de hacer y participar en diferentes eventos, ir generando nuevos productos, de ir moviéndonos de esa manera porque solo el ingreso de las becas no alcanza».
En este sentido apuntó que «hasta el momento el dinero de las becas está llegando normalmente, y nos dijeron que no van a aumentar, pero si que las van a sostener, algo que en definitiva es un montón para nosotros ya que teníamos miedo de que se saquen esos peculios, algo que no sucederá y los operarios las van a continuar recibiendo».
La terapista ocupación detalló que «estamos trabajando actualmente con 32 operarios y una lista de espera de cuatro operarios más y siguen llegando más inscripciones, por suerte somos un montón, que es algo muy positivo, pero a su vez nos encontramos con más demanda de comida para poder atender a todos como corresponde.
Las condiciones están dadas para que se sumen estos cuatro operarios, mientras tanto estamos trabajando en lo que es la parte protocolar que es lo que se realiza con la familia, a su vez luego se va realizando el proceso de adaptación, con lo cual no se dejará ningún operario fuera del taller, pero si nos encontramos con que las becas que llegan de provincia y de nación tienen un cupo y esos cupos ya fueron completados, con lo cual los operarios nuevos no van a recibir las becas, pero si van a recibir la cooperativa mensual que le damos a los chicos aparte, que es dentro de lo que se gana con la venta del estacionamiento, la huerta, las pizzetas y las bolsas“.
«Tenemos el taller de carpintería, de baile, de arte, de psicología, de educación física y tenemos el de RAE, todos son muy bien aceptados por los chicos. En cuanto a estos talleres cabe señalar que el municipio nos ayuda para poder sostener los sueldos de los profesionales que trabajan, algo que también ha sido garantizado», agregó.
Comentó además que «con el mantenimiento de la huerta venimos muy bien, tenemos el espacio muy reducido por la cantidad de demanda al haber más operarios, pero a su vez es para destacar que hay más manos para trabajar, que nos ayuda para que haya más producción».
«Por el momento no tenemos ningún evento previsto para realizar o participar, pero si ante lo que vaya surgiendo estamos abiertos a formar parte, así que si recibimos alguna invitación siempre estamos abiertos.
En este marco siempre estamos abiertos a recibir el apoyo de la comunidad, de allí que aprovechamos estas ocasiones de dialogar con la prensa para invitar a que ayude al Taller Protegido porque se solventa mayormente de la venta de los chicos y muchas se nos hace complicado, y no queremos justamente que deje de funcionar, por eso con el equipo profesional y la comisión siempre estamos haciendo lo posible para que continúe de pie“, remarcó.
La coordinadora del Taller Protegido habló acerca de las situaciones inexplicables que tuvieron que vivir los operarios que trabajan en la venta del estacionamiento medido y que justamente decidieron hacerlo público en las redes sociales.
«Respecto a lo que a veces sucede con el maltrato en el cobro del estacionamiento, lo que hacemos de nuestra parte es trabajar mucho con los chicos, porque el hecho de recibir un maltrato o una agresión verbal los desequilibraba los hacía sentir muy mal, por eso nos enfocamos mucho en eso, después nos dimos cuenta que estas situaciones sucedían cada vez más seguido, con lo cual decidimos empezar a publicar estas cuestiones en las redes sociales y también tomar medidas legales, por esto es que informamos a la comunidad que ante cualquier nueva agresión verbal, física o del índole que sea vamos a realizar una denuncia y se tratará por la vía legal», declaró
En este marco añadió que «por el momento ante situaciones que pasaron ya se pudo resolver ahí mismo con las profesionales que están trabajando con los chicos, pero cuando veamos que se vuelvan a reiterar los casos vamos a actuar de manera legal para que haya un impacto y que la gente entienda que los chicos están realizando un trabajo y que no es la forma de tratar ni a ellos ni a nadie».
Por último, Carolina Olivera comentó que quedó abierta la puerta para seguir compartiendo jornadas con el Centro de Día: «Quedamos tan maravillados por como se dio la actividad que realizamos en el CECIR que nos propusimos hacerlas más seguido, así que vamos a estar en contacto con las chicas del equipo profesional del Centro de Día para poder llevar a cabo una nueva el mes que viene o cuando se pueda, porque claro está que una reunión de estas características tiene su organización, por ejemplo el traslado de los chicos, la coordinación de las actividades, la comida, la autorización de los referentes afectivos y demás, pero quedamos abiertas en la comunicación a hacerlo a corto plazo porque lo que vivimos fue muy lindo».