La madre de la joven asesinada por el expolicía Matías Ezequiel Martínez, hoy cumpliendo reclusión perpetua, aseguró que “la justicia para Úrsula todavía no terminó”, y que sigue activando la causa en procura de deslindar las responsabilidades institucionales del caso – “Fue un femicidio prevenible y evitable”, aseguró Patricia, en entrevista que le concedió ayer a El Nuevo en Radio
Este 8 de febrero se cumplieron dos años del femicidio de Úrsula Bahillo, quien había realizado denuncias previas y se encontraba amenazada de muerte. Sin embargo, la desidia policial y judicial, una vez más, estuvieron presentes y dieron lugar a que el femicida, Matías Ezequiel Martínez, perteneciente entonces a la Policía Bonaerense y hoy cumpliendo reclusión perpetua por el crimen, la violente y luego mate con total impunidad.
De acuerdo al último informe del Observatorio Ahora Que Si Nos Ven ocurre 1 femicidio cada 35 horas en nuestro país. En lo que respecta al 2023 hemos registrado 21 casos de femicidios. Además el 19% de las víctimas de femicidio habían realizado denuncias previas y el 33% fueron asesinadas con armas de fuego.
El femicidio es la punta de la pirámide de una escalada de violencia, pero no ocurre sin previos avisos. En el caso de Úrsula su vulnerabilidad fue aún mayor ya que el agresor era parte de las fuerzas de seguridad. ¿Cómo influye esto a la hora de intentar denunciar? Del informe anual 2022 del Observatorio se desprende que los agresores pertenecientes a las fuerzas de seguridad fueron ocho policías y tres militares.
Ahora Que Sí Nos Ven es un Observatorio de las Violencias de Género que tiene como objetivo visibilizar y denunciar las violencias machistas que afectan la libertad de las mujeres, trans, travestis, lesbianas y personas no binaries.
Sus datos coinciden con los que publicamos en las páginas siguientes, respecto de las cifras desoladoras que plantean los femicidios en particular y la violencia de género en general, en nuestro país.
En este preocupante y desolador contexto, Patricia Nasutti, madre de Úrsula, fue contundente ayer al expresarse en Radio Rojas, en entrevista concedida a El Nuevo en Radio con motivo de haberse cumplido el segundo aniversario del femicidio de la joven rojense: “La justicia para Úrsula aún no terminó”, declaró, en el aire de la FM92.5, y afirmó que continúa activando la causa a los efectos de que la Justicia responda por su actuación en el proceso que llevó al femicidio de Úrsula que, según define Patricia, fue totalmente “prevenible y evitable”. En ese cometido, se encuentra en estos días preparando su acometida en pos del juicio político al fiscal subrogante de Dolores que, poco antes del espantoso femicidio, se negó a concretar la orden de detención que ya pesaba sobre Martínez, por un abuso sexual en perjuicio de una menor con retraso madurativo, facilitando así que se desencadenaran los sucesos que concluyeron con la muerte de Úrsula, quien ya venía denunciando las fuertes amenazas de las que era objeto por parte del expolicía.
En ese sentido, Patricia, que ayer participaba junto a Cecilia Calvet y artistas plásticas locales del proceso de plasmación de un mural alusivo a la memoria de Úrsula, sobre una pared en avenida Fuerte Federación, dijo que “estoy yendo y viniendo con la causa; este fue un femicidio evitable y anunciado, y lo puedo decir con seguridad, porque me entregaron el celular de Úrsula y tengo archivados sus chats con personas a quienes acudió pidiendo auxilio, porque era amenazada. Esto fue un femicidio y también violencia institucional, y por eso estoy detrás del jury del juez Marcelo Romero, que el 5 de enero tenía el pedido de detención del asesino, y de Luciano Calegari (Juez de Paz de Rojas), quien desestimó las denuncias. También hay otras cosas, pero no puedo darlas a luz porque estoy muy cerca de la verdad”.
En este contexto, también declaró que “podría haber novedades para marzo”, respecto de dicho procedimiento que, estimó, podría demandar una serie de audiencias. Además, refirió que se mantiene en permanente contacto con Julio Conte Grand, procurador general de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, de quien, afirmó, obtiene permanente apoyo. “Voy a seguir por y para Úrsula”, aseguró.
En esa línea, también reveló que pudo acceder al interior del auto en el que se movilizaba el femicida, que se encuentra secuestrado por las autoridades, para retirar de su interior las pertenencias de su hija, las cuales, nos dijo, hizo bendecir y regaló a allegados.
Por otro lado, afirmó que se mantiene la custodia de la Policía Federal sobre su persona y vivienda, ya que aseguró haber recibido “muchas amenazas de muerte”, y deploró que desde el año pasado, en marzo, para el Día Internacional de la No Violencia, cuando se le entregó una placa conmemorativa del gobierno local, dicho memorial aún no ha sido instalado. Pero también se mostró contundente al afirmar que una tragedia de esta magnitud “no se entiende hasta que no te pasa”, y cuestionó la falta de apoyo de la comunidad a dicha causa. “Nadie se quiere comprometer”, refirió, y aseguró que “después de lo de Úrsula sucedieron otros hechos que se taparon”, a la par que cuestionó que los vecinos no se hayan acercado ayer a la plasmación del mural en memoria del segundo aniversario del femicidio de su hija.
EXPLOSIVA REVELACIÓN
En el curso de la nota, Patricia realizó una revelación que resultó detonante para nosotros, por lo cual la consignamos en forma prácticamente textual: “Tengo el vídeo de Úrsula, cuando sale corriendo, y él le clava el primer cuchillazo por la espalda, y cuando le dio treinta cuchilladas más, cuando le quiso sacar el ojo. En el juicio le quisieron ‘plantar’ el cuchillo a Adolfo (padre de Úrsula), tenemos los falsos testimonios de los testigos del asesinado. También tengo cuando la empieza a degollar y cuando Úrsula pide auxilio, ‘mamá…’, y hoy nadie me conoce, ¿por qué no hablaron…? Lo de Úrsula fue un femicidio y violencia institucional, lo mires desde donde lo mires…”
