Desde la variedad de propuestas, de estéticas y de innovación de los gastronómicos locales, que instalaron un patio de comidas espectacular, más los asadores montados por los centros tradicionalistas, pasando por los artesanos, microemprendedores y firmas que presentaron sus productos y servicios, y la excepcional calidad de las propuestas artísticas, con momentos trascendentales, la Megaferia volvió con todo, consagrándose ya como uno de los grandes eventos del año
Éxito total de la recuperada Megaferia. Éxito que no fue fácil de lograr, empero. El sábado, primer día del evento, la ciudad amaneció azotada por fuertes y heladas ráfagas de viento, y un día destemplado y nublado, con el sólo sólo brillando escasos minutos cada tanto. El mal tiempo, lógicamente, afectó la concurrencia que se esperaba el primer día de Megaferia. Pero aquí viene lo importante, y lo que resalta aún más este batacazo del evento: puesteros, gastronómicos, organizadores, personal en general… y la gente de Rojas, se bancaron esa primera y helada noche como héroes, aceptando con fortaleza el hecho de que la primera noche las cosas no habían funcionado como se esperaba. Y esta actitud positivo permitió que el domingo, por fin, la fiesta fuese completa. Miles y miles de rojenses desfilaron durante este domingo (y lo mismo acontecía ayer lunes, ya que con excelente criterio el gobierno municipal decidió extender la Megaferia un día más, como para desquitarnos bien de ese sábado no tan agradable), por el predio de la explanada de la UNNOBA, comiendo, bebiendo, comprando, conociendo, escuchando a los artistas. Disfrutando, en suma. Sin un incidente, con una absoluta buena onda que prevaleció inclusive ese destemplado sábado inicial. Una fiesta total. Imposible pasarla mejor.
En este contexto, hay que destacar que la organización fue excelente: muy buena sino excelente presentación general del espacio, planteado con prolijidad y criterio (aunque podría discutirse para la próxima la ubicación del escenario, que en esta primera edición quedó de espaldas al sector gastronómico; entendemos que hubiese sido más adecuado instalar el escenario, espectacular, por cierto), comodidades, puestos sanitarios, seguridad, etc. Impecable todo, y es justo reconocerlo.
En cuanto a las atracciones, el patio gastronómico, junto con los asadores de los centros tradicionalistas, fueron la atracción de quienes gustan de disfrutar de una buena comida. Todos estuvieron no sólo a la altura de las circunstancias sino que sobrepasaron con creces un desempeño óptimo: hospitalario y cordial, los asadores de los paisanos estuvieron concurridos de manera permanente. La paisanada, como siempre, de impecable atención para con la gente. Si partimos desde los asadores de los centros tradicionalistas hacia el el Cristo de la Hermandad, fueron instalados los diferentes puestos de los microemprendedores, artesanos, feriantes, firmas, organizaciones e instituciones: gente cordial y amigable, que con la mejor onda explicaban a qué se dedicaban a quien se detuviera ante sus puestos. E hicieron buenas ventas, detalle crucial. En la explanada de la UNNOBA propiamente dicha, es decir, el sector en el cual se ubica la sede del Centro de Actividades Universitarias “Ernesto Sábato”, que pertenece a esa casa de altos estudios, se encontraba el escenario principal. Y superando el Cristo de la Hermandad, se encontraba el que fue indudablemente el sector más concurrido de la muestra: el espectacular patio gastronómico plantado por los operadores locales del rubro.
Aquí tenemos que mencionar la presentación de cada puesto, todos muy cuidados y bien planteados desde lo estético. Pero el punto es que la mayor parte de los stands fueron operados por gente joven, y esto es muy importante, porque se trata de pibes y pibas rojenses que ya se manejan prácticamente de manera profesional en las gastronomía: algunos son chefs, otros ayudantes de cocina, otros mozos, otros bartenders. Y saben trabajar muy bien, además de ofrecer propuestas de excelente calidad. Entre otros stands visitamos el del Resto Bar Jorge Newbery, con espectaculares sandwiches de entraña y de pata; el de Bouquet, uno de nuestros preferidos, que incluyó el gesto de ofrecer gratuitamente a los transeúntes, unos increíbles shots a base de distintos licores… amén de un whisky especiado que, para aquellos que pudieron probarlo, significó una experiencia religiosa, prácticamente. En el puesto, además de una variedad de tragos y coctelería de excelencia, se destaca el grupo de bartenders, pibes que laburan muy bien y tienen toda la onda del mundo. Pero también apreciamos food-trucks muy bien presentados y montados: allí también, con la mejor disposición para atender a la gente. También estuvo el beer-truck del Chinche, otro amigo que también confirmó en la Megaferia la aceptación de sus cervezas artesanales. Ciertamente, el espacio armado por los chicos de Malcriada fue espectacular y una de las grandes atracciones de la Megaferia: gente que, insistimos, también trabaja en la gastronomía con seriedad y profesionalismo.
En suma, es un hecho que tenemos en nuestro distrito gente joven que se perfila con todas las condiciones para trabajar en los distintos rubros de la gastronomía a nivel profesional: fue un comentario que nos hicieron varios, el domingo, y es que el patio gastronómico, en su conjunto, para muchos rojenses que conocen lugares de nivel, estaba a la altura de cualquier otro que hubiesen visto en algún viaje. Impecable, y otro aciertazo de la Megaferia. Porque queda planteada la posibilidad de realizar un armado similar acaso no sólo como parte de la Megaferia, sino además con sello e identidad propias: ese “Sabores de Rojas”, que alguna vez nos comentara en El Nuevo en Radio, en la previa a la Megaferia, el titular de la cartera de Producción, Hernán Quintana.
EL OTRO PUNTO ALTO
Pero ciertamente otro de los puntos altos del evento fue el nivel de los espectáculos artísticos presentados en su transcurso: desde Yanet Mayoral a la presentación del DanzPare Argentina 2022, organizado desde Rojas por el ballet folclórico Maikan Sumaj, partner de DanzPare Internacional, el sábado, para llegar a la notable actuación del gran Nicolás Membriani, ante un puñado de fieles rojenses que, junto con puesteros y demás, le habían puesto de corazón el pecho a la helada noche. Nico se entregó con todo en el escenario y ofreció una actuación que, les juramos, le puso calor y emoción a la fría noche del sábado. Ni qué decir tiene la apertura del DanzPare, con esa infatigable trabajadora de la cultura y el arte que es Graciela Gallo, que estuvo al frente de todo y en todos lados al mismo tiempo. Conversamos con los integrantes de las parejas internacionales antes de que subieran al escenario y pudimos saludar también a Micaela Mazzuco y Ulises Delbaldo, que representan a la Argentina en el festival.
Y el domingo fue la fiesta: tras el show espectacular de Hernán González, que ofreció un excelente tributo a Luis Miguel, acompañado de una banda de verdaderos animales, entregándose a pleno en el escenario durante más de una hora de actuación, llegó el turno de los amigos de Contratiempos. Que sencillamente la rompieron: los chicos tienen actitud arriba del escenario, la pasan bien y se les nota, y la gente (ya los espectáculos se desarrollaban ante numerosos público, al contrario que el sábado) ya se animó a salir a bailar. Ni qué decir tiene cuando subió al escenario, muy aplaudido, el querido Tigre Goro, que se mandó un show como los que él sabe, con la banda a pleno y toda la polenta para que el baile ya fuese masivo. Además, en un momento dado, subió al escenario Ariel Fullana para interpretar a dúo con el Tigre una versión memorable y emocionante de “Oración del remanso”. Otro gran momento de la Megaferia. Y se esperaban ayer, ya pasado el cierre de la presente edición, en la última jornada de esta Megaferia de tres días, por las actuaciones de la ascendente Ivana Escobedo y Matías y sus Elegidos.
En punto aparte, destacamos la calidad del sonido, a cargo de Martín Jacquin, que no tuvo un solo fallo.
EN SUMA…
… balance más que positivo para esta nueva Megaferia, en la que a simple vista y sin tomar en cuenta la destemplada jornada del sábado, los aciertos superaron por amplio margen algún error que se pudiera haber cometido. Y si los hubo, seguramente de ellos se podrá aprender lo necesario para mejorar en próximas ediciones.
Porque queda claro, y ese era el pensamiento durante el evento de las autoridades municipales, con el intendente municipal, Román Bouvier, a la cabeza, y la plena coincidencia del secretario de Coordinación y Gobierno, Nicolás Scardino, y su par de Producción y Empleo, Hernán Quintana, que la Megaferia ha retornado para quedarse…