SOCIEDAD

La falta de exportaciones golpea al sector automotriz: Bridgestone Argentina al borde del colapso

En un contexto de recesión que afecta a diversos sectores de la economía, Bridgestone Argentina presentó un Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) ante la Secretaría de Trabajo de la Nación. La medida fue justificada por la empresa debido a una significativa caída en las exportaciones, especialmente hacia Brasil y Estados Unidos, lo que ha llevado a la «liberación de tareas» con goce de sueldo para los 1.550 trabajadores de su planta en Llavallol, provincia de Buenos Aires, que podrían ser despedidos.

La compañía explicó que la decisión se basa en que actualmente solo se exporta el 10% de lo proyectado inicialmente, afectando gravemente sus operaciones. Además, mencionaron que el prolongado conflicto gremial con el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (SUTNA) iniciado en 2022 contribuyó a esta situación, generando una pérdida de confianza corporativa que llevó a la transferencia del volumen de exportación a otras plantas de la región.

El SUTNA, por su parte, rechazó categóricamente la presentación del PPC, calificándola de «ilegal» y acusando a la empresa de utilizar una figura inexistente en la normativa laboral vigente. En un comunicado, el sindicato reclamó el inmediato levantamiento del Lock Out patronal y manifestó su oposición a cualquier intento de flexibilización laboral o despidos. Subrayaron además que Bridgestone había obtenido grandes beneficios económicos en los ejercicios 2021 y 2022, siendo obligada a repartir ganancias.

Esta situación profundiza aún más la delicada situación del sector, ya que recientemente la empresa nacional FATE también había recurrido a un procedimiento similar. El PPC, en caso de ser aprobado, permitiría a Bridgestone llevar a cabo una reestructuración que podría incluir despidos sin pagar la totalidad de las indemnizaciones que estipula la ley.

El conflicto ha escalado a nivel nacional, con la Secretaría de Trabajo, encabezada por Julio Cordero, evaluando la solicitud de la empresa. Mientras tanto, el sindicato ha intensificado sus críticas, argumentando que la medida no es más que un pretexto para reducir costos a expensas de los trabajadores, quienes enfrentan un futuro incierto en medio de la crisis.

Desde la perspectiva empresarial, Bridgestone sostiene que la medida es necesaria para adaptar sus operaciones al mercado local y mitigar las pérdidas ocasionadas por la caída en las exportaciones y la conflictividad gremial. No obstante, el sindicato insiste en que la empresa debe asumir la responsabilidad de sus decisiones y mantener los puestos de trabajo sin recurrir a la flexibilización laboral o despidos masivos.

La tensión continúa en la planta de Bridgestone

La situación en la planta de Llavallol es tensa, con los trabajadores y sus representantes sindicales en alerta y dispuestos a defender sus derechos. El desenlace de este conflicto dependerá en gran medida de la resolución que tome la Secretaría de Trabajo en los próximos días.

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