Jardín de Otoño, otro éxito en la temporada teatral de Rojas

Ezequiel Restaine, Edgar Zuttión y Edu Gaitán nos visitaron en El Nuevo en Radio para contar la historia de la obra que esta noche brindará su cuarta función en la sala principal del Teatro TAFS. La puesta dirigida por Victoria Boveri es dueña de excelentes críticas.

El Teatro TAFS y centenares de rojenses han sido testigos en los últimos fines de semana de otro de los grandes éxitos de la temporada teatral rojense, se trata de «Jardín de Otoño», la puesta dirigida por Victoria Boveri, que hasta el momento ha sido objeto de excelentes críticas por parte del público, que llenó la sala en las tres primeras funciones, y se anuncia butacas completas para la función programada para la noche de hoy.

Ezequiel Restaine, Edgar Zuttión y Edu Gaitán son los tres protagonistas de la puesta basada en la dramaturgia de Diana Raznovich, los que se lucen arriba del escenario por casi dos horas, despertando de manera permanente las risas y los aplausos del público.

Los tres intérpretes estuvieron de visita en los estudios de Radio Rojas para contar sobre el proyecto y hablar de las sensaciones que dejaron las primeras funciones.

En principio Edgar Zuttión habló del momento que vive la ciudad en el plano teatral en el marco de la reapertura del TAFS: «Es una gran satisfacción que el teatro esté nuevamente abierto, con todo un trabajo que hubo por detrás para lograrlo, y ojalá que siga de esta manera, con tantas actividades»

«Cuando faltó el teatro significó una pérdida muy gran para la cultura de Rojas, no nos olvidemos que es el primer teatro independiente del interior del país, es un dato histórico, por eso considero que su cierre fue una vejación a la cultura, sobre todo en estos momentos donde todo lo que tiene que ver con el arte está siendo tan vapuleado y atacado día a día, por eso es un hecho de resistencia que los teatros estén abiertos para que cada uno pueda expresar lo que sienta, y en este caso lo hacemos nosotros mediante Jardín», declaró Zutttión.

Ezequiel Restaine destacó que «la cultura está viviendo momentos difíciles, muchas veces por falta de apoyo, pero a su vez el arte lo que tiene es esto de la autogestión que nos permite atravesar estas políticas que dominan el país, por eso reivindico la resistencia de todos para salir al frente, como tantas otras veces a pasado».

Entrando en los detalles de la puesta Edu Gaitán confesó que «el actor iba a ser Ezequiel en una antigua puesta en escena con dos actrices, en pandemia, a mi me tocaba la asistencia de dirección y Edgar no vivía en Rojas, pero la cuestión es que la obra dio vueltas y nunca se hizo, mientras tanto en los cursos de Victoria se hacían muchas escenas, hasta que un día le propuse de actuarla. Luego supe del regreso de Edgar a la ciudad y ahí tiré la idea de hacerla con él, ya que hacía mucho tiempo que no trabajábamos juntos, mientras que Ezequiel siempre se mantuvo».

«Empezamos en enero con las primeras reuniones y a leer los textos, luego tuvimos que ver como se trabajaba la parte audiovisual ya que hay mucho trabajo en la funcionalidad de la escenografía, y a eso hay que sumarle el trabajo actoral, de los ensayos, con el seguimiento de Victoria y de Mecha Carrizo, se trabajó mucho previo al estreno, lo que nos permite estar muy confiados con el producto», dijo Ezequiel.

Edu señaló que «es cierto que Jardín de otoño tiene diferentes puestas, eso corre por la mirada del director, y nuestra idea desde un principio fue este, de poder hacer una novela, proyectarla, mirarla y jugar con eso».

«También se intenta que haya una comunión entre distintas disciplinas, con el arte en lo teatral y el arte en lo audiovisual que es lo que tratamos de mezclar en la obra», agregó Edgar.

En relación a la trama de Jardín de Otoño Restaine indicó: «Son dos amigas, Rosalía y Griselda, que viven juntas y están enamoradas de un galán de ficción, hasta que deciden ser protagonistas de su propia novela, y quizás tomen una decisión equivocada.

«Es una obra que dura 1:40 hora, pero es muy llevadera, no le damos respiro al espectador, está conformada por nueve escenas y todas hacen al eslabón de la historia pero tienen su propio cuentito, que te van llevando al desenlace, y cuando termina casi ni te das cuenta el tiempo que pasó», declaró Edu.

Ezequiel vuelve a tomar la posta para contar que «la obra está planteada como una comedia, donde no parás de reírte, pero los diálogos son fuertes, habla de soledad de las dos mujeres, de una historia del galán sobre lo que hizo para llegar donde está. Hay momentos muy profundos».

Edgar apuntó que «ellas dos terminan siendo arrastradas por estos mandatos como el patriarcado, es una relación que pasa por distintos estadíos, de amor-odio-amor, como una especie de montaña rusa».

Edu subrayó que «Vicki nos dio la seguridad suficiente para poder estrenar porque veníamos con cierta incertidumbre, por eso debemos destacar el trabajo que hizo con nosotros, y que siguen haciendo junto a Mecha fue fundamental para plantarnos ante el público, sin pensar que pudiese suceder lo que está sucediendo. Más allá que la obra sea un éxito de público y que haya mucho trabajo, la respuesta de la gente es fantástica, nos llegan mensajes divinos, por ejemplo personas que no han tenido una buena semana y nos ha ido a ver y nos agradecer por haberle sacado una sonrisa, es lo más lindo que te deja la obra».

«Fue un proceso hasta el estreno y ahora estamos atravesando otro proceso, creemos que la obra tiene que ir creciendo función a función, y lo vamos logrando, por eso es que estamos felices», señaló Ezequiel.

Edu Gaitán consideró que «hacía mucho que no se veía en Rojas una obra tan funcional, la comedia, lo que se veía antes, quizás por lo que pasó en la pandemia, por los costos que se fueron achicando, quizás porque los grandes grupos fueron desapareciendo, por eso ahora se está tratando de recuperar a través de monólogos, y con esto buscamos volver a esa comedia de las de antes».

«La relación del grupo es excelente, claro está que hay idas y vueltas como en todo grupo, y consideramos en ese sentido que lo fundamental es cuidarnos entre nosotros, porque el laburo depende del cuidado colectivo de todos, y eso creo que se ve arriba del escenario, y no solo respecto a lo que pasa entre nosotros, sino también incluyo la relación con las directoras que es fantástica», destacó Gaitán

Edgar dijo sobre la directora: «Victoria es bárbara, es una gran hacedora de que este tren esté caminando sobre los rieles, porque tanto Ezequiel como Edu ya vienen con un proceso de formación en los cursos de ella,  pero en mi caso me encuentro ahora con su metodología, y siento que es una experiencia muy gratificante».

«El actor está todo el tiempo buscando, y lo que te da Victoria son muchas herramientas, además cada ensayo es como una clase, donde su devolución es fundamental para ir profundizando», añadió Edu.

En cuanto a las trayectorias de cada uno Edu Gaitán recordó: «Empecé a los 14 años, cuando entré al teatro a preguntar quien dictaba talleres y me encontré con uno dirigido a adolescentes sorprendente, que la tenía a Gabriela Azaretti a la cabeza, me quedé a ver que pasaba y nunca más salí, fui conociendo gente, grupos, encontré esas ganas de empezar a actuar, así que fue estuve en varias obras».

Edgar por su lado señaló: «También empecé en el taller de Gabriela Azaretti, con Sole Abril, después me fui a vivir a Rosario, luego a Buenos Aires, siempre con el deseo ferviente de hacer teatro. Allá empecé a formarme, con el ingreso en la UNA, donde solo hice cursos de extensión, para luego ir buscando distintos maestros, como Mariana Briski.

Entré a trabajar en una compañía de teatro por siete años, que fue algo que me marcó porque había que actuar todos los días dos veces, mientras tanto hacía otros shows con gente que me iba vinculando».

«En la pandemia decidí regresar, con la tristeza que significaba el momento y a la vez con la alegría que significó la reapertura del teatro, que hoy me permite estar con grandes compañeros y haciendo una obra que está saliendo diez puntos», agregó.

Ezequiel Restaine dijo por su lado: “Comencé en los talleres de Leo Martínez, siempre en el TAFS, luego siguió la pandemia y mientras tanto busqué formarme, por eso tengo más cursos que experiencia, hasta que me convocaron Lorena Gutiérrez y Diego Albamonte para hacer una escena con Marta Seta que se hizo al aire libre y formó parte de un ciclo televisivo»

“Lo nuestro en la previa es bastante relajado y hasta festivo, nos divertimos mucho en el detrás de escena, antes y después también, no hay ritual ni nada de eso, pero si nos concentramos, repasamos a lo mejor alguna escena, mientras tanto vamos al camarín a maquillarnos, peinarnos, y por eso llegamos temprano“, sostuvo Edu Gaitán, hablando del detrás de escena.

Edgar contó además que “ya tenemos un horario establecido para estar porque lleva un tiempo, hay pelucas, maquillaje, hay mucha utilería que vamos usando, también hay varios cambios de vestuario para los personajes de Griselda y Rosalía, por eso también Ezequiel nos ayuda en el detrás de escena“.

«En lo personal superó ampliamente las expectativas, confiábamos que iba a estar bueno, pero quizás no esperábamos tanto marco y en las dos funciones, es emocionante los mensajes que llegan personalmente o por WhatsApp, es lindo que la gente se vaya contenta de la obra, ha logrado una identificación en el público, más aún cuando estamos en una época en la cual el tema de la novela se ha perdido, aunque si se pueden encontrar en diferentes plataformas, o sea que hay gente que las sigue y eso se ve reflejado en nuestra puesta“, finalizó Ezequiel, el galán de otro de los grandes éxitos de la temporada teatral rojense.

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