El delantero que nació en las categorías formativas de El Huracán y debutó en la primera división del Fútbol Argentino con Sarmiento, sumó minutos este año en la Primera Nacional con los colores de Flandria. En un diálogo imperdible con Panorama Deportivo repasó toda su carrera y dijo sentirse «muy conforme con lo que vengo haciendo hasta el momento».
Aquel gol que convirtió ante Newell´s Old Boys que depositó a Sarmiento en la siguiente instancia de la Copa Argentina 2021 parecía significar un antes y un después en la carrera futbolística de Benjamín Borasi, quien anteriormente había integrado el plantel del Verde que había logrado el ascenso a la categoría superior de nuestro país y posteriormente se dio el gusto de mostrarse en los estadios más imponentes, teniendo muy fresco en su memoria el recuerdo de cuando le tocó pisar el césped de la Bombonera.
Como mediapunta, como delantero, en algunos casos avanzando por los costados, Benjamín Borasi se presentó como una buena alternativa en Sarmiento, indudablemente sin pesarle la responsabilidad y con movimientos que nos hacían viajar atrás en el tiempo y observarlo en el «Elvio Cruz Fachile» dando los primeros pasos en El Huracán, club donde también llegó a jugar en la Primera división.
Todo parecía ir de diez para Benjamín Borasi, pero por esas cuestiones que tiene el Fútbol Sarmiento se fue renovando, hubo cambios de técnicos, llegada de jugadores y la decisión del jugador, de común acuerdo con la institución, de buscar una nueva alternativa.
En el camino se atravesó Flandria, elenco que recién ascendía a la Primera Nacional, entidad a la cual se sumó para lograr minutos, sumar experiencia y mostrar sus condiciones, dejando sin dudas una muy buena imagen más allá que al plantel le costó adaptarse a la segunda categoría.
Benjamín Borasi estuvo de visita en Radio Rojas y repasó su carrera, comentando en principio los motivos de su salida del Verde juninense: «Me sentía bien en Sarmiento, venía jugando en Primera y tenía minutos en cancha lo cual me estaba sirviendo, pero luego comenzó la pretemporada y hablé con Damonte porque había muchos jugadores en mi puesto, habían contratado varios jugadores en general y éramos cuarenta en el plantel, así que le comenté que tenía propuestas para ir a la Primera nacional y le pedí su opinión, y me aconsejó más como amigo que como técnico, así que me dijo que había tenido una experiencia similar, como varios jugadores adelante y tuvo que dar un paso atrás para tener la chance de jugar, así que me dijo que era lo mejor que podía hacer para sumar minutos. También me dijo que me quería en el plantel porque sabía lo que le podía aportar como jugador, pero que a lo mejor no iba a tener tantos minutos, y eso me llevó a tomar la decisión».
«Obviamente que estaba en un club que conocía y que estaba en Primera y me quería quedar a pelearla, pero él me dijo que lo mejor era buscar otro camino, me comentó su experiencia en Estudiantes y me convenció, también sabía que en la Primera Nacional hay muy buenos equipos, con grandes jugadores y que todos los partidos son muy difíciles y parejos, o sea que iba a ser una linda posibilidad para mostrarme», explicó.
Respecto a su paso por Flandria dijo que «tuvimos un técnico casi todo el campeonato y cambiamos para las últimas seis fechas que fue Della Riva, que me dijo que había tomado una buena decisión, porque mucha gente no me conocía y cuando comencé a jugar en Flandria habían puesto el ojo en mí, lo cual me sirvió como motivación».
«La intención era ir a un club que pelee por cosas más importantes, incluso había tenido llamados, pero como Damonte llegó tarde a Sarmiento el tiempo fue pasando y prácticamente no llegué a hacer pretemporada, por lo tanto no me quedó mucho para elegir y terminé inclinándome por Flandria», indicó.
Más allá de lo que fue la salida del club Benjamín aseguró que «el vínculo con Sarmiento terminó muy bien, ellos seguían mi carrera y me llamaban para decirme que siga de esa manera porque sabían que tenía que volver al club».
El futbolista nacido en el club El Huracán comentó que «me gusta jugar de media punta y hacerlo generalmente por el sector izquierdo, siempre con libertad para moverme, y también trato de presionar en la salida e intentar robar el balón porque eso genera confusiones, trato de sacrificarme mucho por el equipo más allá de mis funciones ofensivas».
«Cuando cambié de una división a la otra me llevó algunos partidos adaptarme porque son categorías diferentes en cuanto al tiempo que tenés para maniobrar, porque en primera te dan un tiempo más, es más técnico, podés pensar lo que vas a hacer, mientras que en la Primera Nacional no hay tanto tiempo, te aprietan mucho y eso te lleva a encontrar variantes en el juego, apelar a las mañas, son cosas que tenés que aprender porque de lo contrario no podés jugar», sostuvo.
Siguiendo con la temporada que vivió en el Canario declaró que «Farré, que fue compañero en Sarmiento, me dijo que lo habíamos complicado mucho, eran momentos en que apostábamos más a la tenencia de pelota y por eso le generamos mucho, pero Belgrano tuvo jugadores de gran jerarquía que te ganaban los partidos con su experiencia, mientras que en el caso de Instituto nos mató físicamente, nos comieron en los primeros 25 minutos, fueron los dos mejores equipos sin dudas del campeonato».
«Me encontré con un club que está creciendo de a poco, es muy de pueblo, la gente apoya mucho, obviamente que no es Sarmiento, pero está muy ordenado, por eso me sentí cómodo desde el primer día. En cuanto a la gente siempre acompañó a pesar de que no estábamos tan bien en la tabla, fue sin dudas una linda experiencia, y siempre me trataron muy bien», aseguró.
Benjamín Borasi habló de su encuentro con Franco Tissera, ídolo de Flandria tras haber convertido el gol del ascenso a la Primera Nacional: «No nos conocíamos con Franco porque él se había ido de chico de Rojas y no lo había visto nunca jugar, pero allá establecimos una relación y nos llevábamos muy bien, él era muy querido por haber convertido un gol fundamental por el ascenso».
«Franco tenía tres goles y dos con asistencias mías así que lo cargaba, por suerte nos pudimos acoplar muy bien en ataque y nos gustaba jugar juntos», destacó.
«El vínculo con la familia no cambió demasiado al que tenía cuando estaba en Sarmiento porque vivía en Luján y estaba a una hora y media, entonces me venía cada vez que podía a ver a mi familia y mi novia, aunque fueron muy pocas las veces porque prácticamente no hubo descanso», indicó.
En relación a su futuro sostuvo que «estoy de descanso y mientras tanto esperando si sale algo porque me gustó la experiencia y el trato que me dieron, de todos modos si no es en Flandria u otro club de la Primera Nacional sé que tengo la chance de volver a Sarmiento y pelearla allí, también con la posibilidad de compartir con Lisandro, con quien nos conocimos y durante el año me fue mandando mensajes para ver como andaba, siempre me trató muy bien, por eso sería muy lindo jugar con él».
El nacido en las formativas del Globo recordó lo que fue su encuentro con Lichi López: «La figura de Lisandro es imponente, para mí el hecho de compartir una semana y media con él fue fantástico, se notaba que había afecto y cuando llegué a Flandria me mandó un audio diciéndome que le hubiese encantado tener la posibilidad de jugar juntos, que mientras tanto aproveché la oportunidad. Fue un momento muy emocionante y ahí te das cuenta porque lo quiere tanto la gente».
«Estoy contento con lo que es mi carrera hasta el momento, me tocó irme de grande a Sarmiento, a los 18 años, y pasó todo muy rápido porque a los 21 ya estaba debutando de la mano de Patricio Hernández, con quien tengo todavía contacto. Luego llegó el ascenso que fue un gran logro, porque salimos campeones y primeros, algo que es muy difícil, y fue más importante aún porque veníamos de perder dos finales», subrayó.
Sobre lo que fue su momento en la máxima categoría del Fútbol Argentino sostuvo que «lo que viví en primera fue genial porque tuve la chance de enfrentar a los grandes, jugar en la Bombonera, cosas que soñaba de chico, luego por cosas del fútbol me tocó bajar de categoría, pero estoy seguro que voy a volver en algún momento.
No podía creer cuando me tocó entrar a la Bombonera, un lugar donde jugó Messi, también estar en estadios llenos, sentir la presión en cada lugar, cuestiones que al principio te hacían titubear, pero una vez que arrancaba el partido te olvidás todo, más cuando vas ganando en experiencia».
«La familia me siguió siempre, por ahí a los estadios de los clubes grandes no podían ir, pero siempre muy felices de que pueda estar cumpliendo el sueño de ser profesional, siempre el apoyo de ellos ha sido muy importante», remarcó.
«Por ahora estoy esperando que surge, si sale algo en Argentina o afuera, son momentos de incertidumbre donde voy estudiando lo que escucho y después seguramente evaluaremos con todas las cartas sobre la mesa. Mientras tanto lo vivo con mucha ansiedad, quiero saber en que categoría voy a jugar, si es afuera o no, por ahora digamos que me tengo que entretener con el mundial y es el representante el que me cuenta que va pasando», comentó.
«Me gusta el Fútbol de Chile, tuve compañeros que han jugado y me dijeron que es una buena experiencia, también me gusta el país, pero después hay que ver que sucede, hay que estar tranquilo y esperando que todo vaya sucediendo a su tiempo», cerró Benjamín Borasi, otro futbolista que lleva la bandera de Rojas en el profesionalismo, que bajó de categoría para sumar minutos, mostró que sus condiciones están para mucho más, y ahora espera por volver a pisar el césped de Primera, mientras tanto mantiene la misma frescura que cuando partió de la ciudad, la que mostró aquel día que pisó la cancha de Boca Juniors o cualquiera de los estadios más importantes del país.