Tras las lluvias registradas a lo largo del fin de semana el Ingeniero de la Cooperativa Agropecuaria de Carabelas hizo un balance de lo que fue el registro anual, sosteniendo que hubo un faltante importante de agua y que “las lluvias se dieron de muy mala manera para los cultivos”.
El último día del 2022 y primero del 2023 se presentó en Rojas y la zona con una particularidad sumamente relevante, porque desde la noche del sàbado, casi al momento del brindis, y durante la jornada del domingo, fue la lluvia la que acompañó las celebraciones por el año entrante, un detalle no menos relevante para el sector agrícola-ganadero, que durante toda la temporada estuvo implorando por la caída de agua, ya que la sequía reinante perjudicó el trabajo en la mayoría de los cultivos, provoncando serias pérdidas en el plano económico para los productores.
Si bien la lluvia se extendìo por varias horas, según los entendidos, no fue lo suficientemente cuantiosa como para recuperar todo lo que no sucedió a lo largo del año, sin embargo la consideran como positiva para la siembra de los distintos cultivos de esta época.
En nuestra ediciòn de ayer marcábamos el panorama que se había registrado en la zona respecto a la cantidad de lluvia caída, siendo la vecina localidad de Carabelas la que mayor recibió con 19 milímetros, por detrás Hunter con 14, Rojas con 12 y Rafael Obligado con 10.
De acuerdo a diversas fuentes, como el Centro de Investigación de Recursos Naturales del INTA y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), los mayores acumulados se concentraron en el centro del país: sur de Córdoba, San Luis, La Pampa, y noroeste y sur de Buenos Aires.
Algunos ejemplos puntuales fueron Trenque Lauqen (37 milímetros), Río Cuarto, General Pico y Huinca Renancó (35 mm); Monte Buey (31 mm), el Observatorio de Córdoba (22 mm), Pilar de Córdoba (15 mm), Bolívar (14 mm), 9 de Julio (12 mm), Pehuajó (12 mm), Santa Rosa de La Pampa (11 mm), Pigüé (7 mm) y Coronel Suárez (3 mm).
Tomando como referencia estos números y la situación que se ha ido reflejando a lo largo del año en relación al campo fue que El Nuevo Diario Rojense se trasladó a la seccional Rojas de la Cooperativa Agropecuaria de Carabelas, donde establecimos contacto con el Ingeniero José Gil.
El profesional agrónomo, fuente constante del panorama, habló del resultado que arrojó la lluvia que cayó el fin de semana y trazó un balance de lo que fue el año.
El Ingeniero José Gil manifestó que “como cada cierre de año medimos la lluvia de enero a enero y año pasado hemos recibido apróximadamente entre 650 milímetros a 700 milímetros anuales de una plumetría que habitualmente estaba rondando entre los 900 y 1100 milímetros, es decir que estamos en un faltante anual de 400 a 650 milímetros en el año, con el agravante de que la mayoría de las lluvias del 2022 se dieron de mala manera, y lo digo de esta manera porque quedaron muy concentradas en el verano pasado, entre enero, febrero y marzo, donde, si bien fue bueno para la soja del año pasado, no jugaron a favor para la fina de este año, que todos sabemos que fue fallida, más las implantaciones de la gruesa que vienen errando, por lo cual consideramos que estuvieron mal distribuidas para ser concretos”.
En este sentido sostuvo que “hubo mucha resiembra de soja porque la siembra venía atrasada, también quedaron lotes sin hacerse hasta el momento, por lo tanto se está esperando por alguna lluvia cuantiosa respecto de los que salieron de la fina porque los lotes están bastante secos y la única manera de hacerlos es si cae una buena cantidad de agua.
En cuanto a la implantación de la gruesa, en lo que es la soja de primera hubo una implantaciòn bastante errática, no pudiendo arrancar con fechas tempranas, con lo cual hubo que terminar con fechas de noviembre como se hacía antiguamente, en tanto que el 90 por ciento del maíz se pasó a siembras tardías. El maíz de segunda para el caso hubo siembras de diciembre que fueron hechas entre el 10 y los últimos días del año”.
Sobre el contacto que está teniendo en estos días el productor con la Cooperativa de Carabelas explicó lo siguiente: “El productor se está acercando mucho a la cooperativa por consultas, sobre todo en lo que es manejo en general porque empiezan a aparecer los problemas de falta de agua, por ejemplo los barbechos largos que en algunos casos no se habían hecho del todo bien habían consumido toda el agua, por lo tanto nos preguntan que hacer en lo inmediato con esos barbechos largos, que hacer con las reservas de agua, si hay que cambiar fechas de siembra y variedades”.
Agregó en este marco que “también nos piden asesoramiento en lo financiero, que es lo que más afecta ya que la pérdida de la fina y una gruesa incierta te da algún problema en lo financiero, aunque no considero que sea económico aún porque la gruesa está haciéndose, y si la gruesa no falla el problema no sería económico, pero si se generaría un desfasaje de dinero si la gruesa comienza a fallar”.
Siendo más preciso en cuanto a los números que dejó el agua caída durante el fin de semana comentó que “la lluvia del primer día del año se podría decir que estiró un poco la agonía porque fue pobre porque fue una lluvia de 12 a 15 milímetros según la zona, lo que hizo que las sojas de primera puedan seguir, que los maíces también puedan seguir, pero también hay que tener en cuenta que nos dan una semana con altas temperaturas, por lo tanto estamos esperando una lluvia cuantiosa. Mientras tanto se está terminando de definir alguna siembra de segunda que estaba en duda en lo que respecta a la soja, aunque sigue siendo escasa la cantidad de agua, de allí que estamos esperando una lluvia que supere los 70 a 80 milímetros como para poder recuperar algo del perfil que no tenemos”.
“En lo referente a la fina el 80 a 90 ciento de los lotes se levantaron con rindes de 1000 a 1200 kilos, de 8 quintales y algunos lotes que estaban por debajo de los 4 o 5 quintales ni se levantaron, o sea que directamente se fueron a sembra a soja”, explicó.
“Desde nuestro lugar les aconsejamos a los productores se prudentes, no deseperarse con las labores, no tomar decisiones de siembra con la falta de humedad, prestar atención atenciòn a los perfiles porque la humedad está en los primeros cuatro a cinco centímetros, en tanto después tenemos unos diez a doce centímetros sin humedad, con lo cual hace que si uno implanta sobre esos primeros centímetros,