La Cámara de Diputados dio media sanción al RIGI bonaerense que envió el gobernador Axel Kicillof, cuyo principal objetivo será atraer inversiones.
En la Gobernación bonaerense no pueden disimular cierta mueca burlona luego de que la malaya Petronas dejara trascender que no pondría un peso en la planta de GNL que proyecta construir YPF en Río Negro, tras dejar con las ganas a Bahía Blanca.
El gobernador Axel Kicillof tuvo un respiro a las críticas que recibió por no adherir al Régimen de Incentivos a Grandes Inversiones (RIGI) de Nación, cuando la Cámara de Diputados bonaerense le dio media sanción al RIGI bonaerense.
El proyecto fue enviado por el Ejecutivo a la Legislatura el pasado 11 de septiembre, pero no pasó por las comisiones, por lo que el oficialismo necesitó dos tercios de los votos para habilitar el tratamiento en el recinto, para luego buscar la aprobación por mayoría simple.
La votación finalizó con 37 votos a favor (todos del bloque de Unión por la Patria), 28 en contra (bloques PRO, PRO Libertad, La Libertad Avanza) y el resto de los legisladores, pertenecientes al radicalismo y al bloque Unión Renovación y Fe, decidieron abstenerse.
Al oficialismo bonaerense le alcanzó con los votos propios para aprobar la iniciativa del Poder Ejecutivo. El resto de las bancadas opositoras se abstuvieron, pero otorgaron el número necesario para que se desarrolle el tratamiento. A pesar de lo que suponía, los nueve miembros de Unión, Renovación y Fe (autodenominados libertarios dialoguistas), habituales aliados del oficialismo, se abstuvieron, facilitando la media sanción.
También ocurrió lo mismo con los 17 legisladores representantes del radicalismo: nueve del abadista, que conduce Diego Garciarena, y ocho del que responde a Manes y Lousteau, comandado por Claudio Frangul, por lo que dicha postura más alguna ausencia, facilitaría al oficialismo cantar victoria
De acuerdo a lo que indica el proyecto, y lo que expuso el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Augusto Costa, tanto en la Legislatura como en la celebración del Día de la Industria en Ituzaingó, el RIGI Bonaerense consta de una iniciativa para promover inversiones en línea con los objetivos productivos de la provincia”.
Busca la generación de valor agregado, la creación de empleo de calidad, el desarrollo de proveedores locales, la transferencia de nuevas tecnologías. Además de diversificar la matriz productiva, el impulso a las exportaciones provinciales, la reducción de los desequilibrios territoriales y la promoción de nuevos sectores productivos.
Los sectores alcanzados son la industria manufacturera, los servicios que incluyen el turismo y logística, sectores intensivos en recursos naturales y proyectos estratégicos que por fuera de estos sectores sean considerados estratégicos por parte del gobierno de la Provincia.
“Es un proyecto que involucra a sectores particulares, pero que también tiene la amplitud para que en caso de que haya proyectos de inversión estratégicos y sean consistentes, que puedan ser parte de este régimen” sostuvo Costa.
Los boina blanca aseguraron días atrás que el texto era insuficiente y tardío, además de ser “poco tentador” para los inversores.
“Una de las observaciones más importantes es cómo y quién va a evaluar la admisión o no de una empresa, una persona física, una persona jurídica a este régimen de evaluaciones para que no se convierta en una cuestión discrecional y arbitraria del Estado o del gobierno provincial”, sostuvo Garciarena.
En la vereda del NO se pararon 34 diputados: los libertarios de La Libertad Avanza, que conduce Agustín Romo; el PRO “oficial”, bajo la batuta de Agustín Forchieri y los dos legisladores de la Izquierda, además de los amarillos del PRO Libertad (bullrichistas), presididos por Florencia Retamoso.
Desde el PRO señalaron que el RIGI provincial no es atractivo, y que “espanta inversiones más que fomentarlas”, en palabras del senador Alejandro Rabinovich, titular del grupo amarillo en la Cámara alta y voz de los legisladores de ese sector.
Algunas consideraciones respecto a la presentación del RIGI provincial de @Kicillofok que hizo ayer el Ministro @CostaAugusto9 pic.twitter.com/D4xXR8u4iN
“Los aspectos a evaluar para determinar la aprobación de un proyecto incluyen una serie de condiciones arbitrarias y poco claras que pueden hacerlo poco atractivo para el potencial inversor. Esto incluye la transferencia de conocimiento y capacidades tecnológicas con organismos estatales e instituciones académicas y acciones poco especificadas para avanzar con la equidad de género en el ámbito laboral”, analizó el dirigente, mano derecha del intendente Guillermo Montenegro.
Además, y tras acusar al oficialismo de vedar la discusión, remarcan que en el texto no se incluyó una referencia a proyectos de “interés estratégico”, o que no se haya explicitado la posibilidad de que sujetos extranjeros puedan adherir al programa.
También cuestionaron que se ignoró a los sectores agropecuario y ganadero, dos de los principales motores que impulsan la economía bonaerense, además de anteponer cuestiones de género al momento de aprobar una iniciativa o la discrecionalidad del Ejecutivo para decidir quién se acoge y quién no al programa.
En rigor, el RIGI bonaerense propone tres grupos de beneficiarios de acuerdo al monto de la inversión, que gozarán de exenciones fiscales parciales sobre los impuestos a los Ingresos Brutos, Inmobiliarios y de Sellos.
El primero con un monto de inversión de hasta USD 50 millones con exenciones del 30% por 5 años; el segundo con desembolsos de entre USD 50 y 200 millones con reducciones del 25% por 4 años; y el tercer pelotón con inversiones mayores a USD 200 millones, con beneficios del 20% por 3 años. Costa sostuvo que se pueden acumular otras ayudas adicionales, que no podrán superar los 15 años.