Como estaba previsto, el evento tuvo lugar este viernes por la noche, en la vereda de esa sede institucional – Hubo teatro y danza, cantaron Melisa Opisacco y Fiorella Spadone, ovacionadas ambas, y la Agrupación Coral de Rojas ofreció un impactante miniconcierto – El Tigre Goro le puso ritmo a una espectacular fiesta en la que no faltaron distinciones y reconocimientos, como así también emotivos reencuentros y visitas y momentos sumamente especiales
Con un espectacular festejo popular llevado adelante este viernes por la noche, en la calle, frente a su histórico edificio, el Teatro Libre Florencio Sánchez convocó a una multitud de amigos para celebrar el septuagésimo tercer aniversario de la fundación de una de las instituciones más prestigiosas del movimiento teatral independiente a nivel nacional.
Y como debía suceder, fue una fiesta maravillosa, un reencuentro entre viejos compañeros y compañeras, y las nuevas generaciones teatrales, además de un rimero de presencias especiales, distinciones, reconocimientos y visitantes tan ilustres como amigos de la casa. Pero también hubo teatro con interesantes propuestas, una de ellas, “Rotos de amor”, dirigida por Diego Albamonte, que pronto será puesta en escena en versión completa. Pero también estuvieron dos cantantes de altísimo vuelo, como Meli Opisacco y Fiorella Spadone, muy aplaudidas por el público presente. También estuvo el querido Tigre Goro, poniéndole todo el ritmo y la onda a la velada. Párrafo aparte para el impactante miniconcierto ofrecido en el inicio de la velada por la Agrupación Coral de Rojas. En veraniegas remeras, los muchachos y muchachas de la ACR, conducidos por la profesora Delia Martínez, ofrecieron bellísimas versiones de canciones de María Elena Walsh y Víctor Heredia, y en especial de un clásico del repetorio de la ACR, “Los pájaros perdidos”. Hay que reconocer que la ACR se lució, presentando un conjunto de voces muy afiatado, con arreglos muy bellamente elaborados y bien trabajados, y, en suma, demostrando un enorme grado de madurez interpretativa.
Pero también se rindieron merecidos tributos a los históricos: cómo no iban a estar presentes Charol Araldi, Tuky Teyssandier, Chola Manjarín, Pocha Díaz. No pudo estar presente Marta Seta, por alguna cuestión de salud, pero envió sus saludos. Ni qué decir tiene que al recibir su distinción, Charol recibió ovaciones de pie de parte de los presentes.
Participó de la velada el intendente municipal, Román Bouvier, quien entregó a la comisión directiva del TAFS, encabezada por Vicky Boveri, quien ofició de maestra de ceremonias, una plaqueta conmemorativa, en nombre del gobierno local. Bouvier estuvo acompañado en este caso de su director de Cultura, Alejandro Elcoro.
Otro de los momentos especiales fue cuando el exconvecino rojense Walter Núñez, quien cumple funciones en áreas del gobierno provincial, y colaboró actívamente para que el TAFS recuperase su personería jurídica, acercó a la velada una camiseta de mangas largas, parte del vestuario original de la recordada “Que siga el corso”, aquella emblemática y “subversiva” (según las autoridades de aquel momento) puesta que el TAFS realizó en la época de Osvaldo Rey, con un elenco de lujo, y que le valió a la entidad que se desatara sobre el grupo ya una decidida persecución por parte de la dictadura del proceso.
En suma, una vez más el TAFS convocó y los rojenses dijeron “presente”. Y esto es importante, porque todavía queda mucho camino que recorrer para lograr la posibilidad de habilitar la sala teatral más importante de la provincia para el movimiento independiente.
La institución, como se sabe, viene de recuperar su personería jurídica, mientras se avanza con la escrituración del histórico edificio (que este año cumple sesenta y un años de su inauguración), y la habilitación de la sala. Para esto se deben realizar aún algunas obras edilicias, pero todo permite indicar que la reactivación del TAFS está ya muy cerca.
En efecto, ya se cuenta con el correspondiente encuadranamiento por ante la dirección provincial de Personas Jurídicas, reconociendo al TAFS como asociación civil. Este hecho, en sí mismo, implica el final feliz para un largo proceso de normalización institucional, que hubo que remontar a lo largo de estos dos últimos años. Es importante destacar que esta circunstancia implica que ahora el TAFS está en condiciones de recepcionar los subsidios nacionales y provinciales que se otorgan a las salas y elencos teatrales, beneficios que antes estaban bloqueados justamente por el desorden administrativo que afectaba a la institución.
Además, se han producido enormes avances en cuanto a otros aspectos clave: por un lado, la formalización de la escrituración dominial del edificio histórico del TAFS a nombre de la asociación civil, que ya está cerca de concretarse, y por el otro, la obtención de la correspondiente habilitación del espacio, lo cual demandará la concreción de una serie de obras de infraestructura.
El TAFS, a través de ya casi setenta y tres años de historia es una parte importantísima de Rojas; representa el arte independiente, no profesional, y significa, concretamente, la obra viva de un grupo de visionarios tan irresponsables como geniales que creyeron muy sencillo generar un movimiento teatral independiente, con edificio propio, en un rincón de la Pampa Húmeda.
Como se sabe, el TAFS viene de atravesar una complicada situación institucional que, a partir de un serio y comprometido trabajo de la actual conducción de la entidad, anteriormente formalizada como comisión normalizadora, ha logrado subsanarse y mira para adelante con optimismo ya que en breve el Teatro volverá a contar con su correspondiente habilitación, de modo que, cuando estén dadas las condiciones, estará recuperando la actividad teatral.
En ese sentido, este año también se recordarán los sesenta y un años del edificio, que constituyen una recordación de importancia intrínseca para la institución, tanto como el propio aniversario de la fundación del TAFS, en virtud de que en abril de 1962 quedaba inaugurado el primer edificio propio de un grupo teatral independiente de la provincia de Buenos Aires. Y hay quienes sostienen que es posible que también el del TAFS haya sido uno de los primeros teatros independientes del país.
Una brevísima reseña muestra la seriedad y compromiso del TAFS con el arte y la cultura:
-Es seleccionado cuatro veces para representar a la Provincia en la Muestra Nacional de Teatro Independiente. Así llegó al escenario del Teatro Nacional Cervantes con las obras “Así es la vida” por la cual recibe el Diploma de Mención Extraordinaria, además de presentar allí “Una libra de carne” y “Memorias a contraluz”, y al entonces Teatro Cómico, hoy Lola Membrives, con “Temístocles en Salamina”.
-Organiza la Primera Muestra Teatral de la Provincia de Buenos Aires, luego la Segunda y más tarde la Tercera. Todas con singular éxito.
-Organiza el Primer y Segundo certamen de Teatro Juvenil de Rojas por dos años consecutivos.
DETALLES DE LA VELADA
Tras la apertura formal del festejo, se entregaron las siguientes distinciones y reconocimientos:
-A los fundadores Alfredo Araldi, Mabel Manjarín y Pedro Martínez;
-A Marta Seta, Lila Cohen, Eduardo Forese, Jorge Geijo, Carlos Raúl Teyssandier y Elba Díaz, y post mortem a los inolvidables Hugo Matheu, Mario Gazo y Negrucha Seta.
-Reconocimiento al elenco de “Así es la vida”.
-Reconocimiento al elenco de “Una libra de carne”.
-Reconocimiento al elenco de “Temístocles en Salamina”.
-Reconocimiento al elenco de “Memorias a Contraluz”
Aportaron lo suyo teatralmente:
-Fabio Pérez, con el monólogo “Oración con proyecto de paraíso”, de Eduardo Sacheri, dirigido por Diego Albamonte y Lorena Gutiérrez.
-Escena de “Rotos de amor”, con Enzo Fauda, Tito Sánchez, Cholo Medina y Germán Palmieri, dirigidos por Diego Albamonte y Lorena Gutiérrez.
-Escena de la obra “Tío Vania”, de Chejov, a cargo de alumnos de Vicky Boveri.
Y le pusieron música a la fiesta:
-Agrupación Coral de Rojas.
-Melisa Opisacco y Luciano Dellabianca.
-Fiorella Spadone.
-El Tigre Goro.