Estela de Carlotto dejó un mensaje de unidad: «No todos pensamos lo mismo, pero las diferencias no nos hacen enemigos»
Luego del fallecimiento de la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, su par de Abuelas, Estela de Carlotto, aprovechó para destacar su lucha por los derechos humanos a pesar de las fuertes diferencias que tenían entre ellas, al tiempo que dejó un mensaje de unidad a la sociedad.
«La noticia de su fallecimiento me causó mucha tristeza, si bien por la edad que tenemos es de esperar la muerte, no obstante uno piensa cuánto más podría haber seguido haciendo desde lo que tenía como convicción en derechos humanos. No coincidiamos en absolutamente en nada en muchas cosas, pero fue reconocida por el mundo entero y se dedidcó a pregonar la necesidad de la condena, a buscar a los que no volvieron», evaluó Estela en diálogo con FM Cielo.
COMUNICADO OFICIAL
El gobierno decretó 3 días de duelo nacional por el fallecimiento de Hebe de Bonafini
En tanto, recordó que en los primeros años de la dictadura «caminamos juntas porque estabamos formándonos en qué hacer ante esta situación, porque si bien la Argentina tuvo muchas dictaduras, esta última fue feroz; la búsqueda empieza y no termina nunca».
«Luego vino la división y nuestra relación es más con la línea fundadora porque a veces por su carácter tenía momentos difíciles de entender o razonar, pero lo que importa es lo que dejó, lo que hizo», evaluó la histórica y reconocida referente.
El futuro de Abuelas y un mensaje de unidad
Estela de Carlotto está a cargo de Abuelas de Plaza de Mayo desde hace 45 años y fue -junto a sus compañeras- una de las máximas responsables de la recuperación de la identidad de 130 nietos y nietas apropiados durante la última dictadura cívico militar.
«Todas las abuelas y madres salimos de nuestras casas, trabajos, nosotras por nuestra edad hemos sufrido tantas dictaduras, pero pasaron sin que nos afectara la vida rutinaria y por la violencia de esta última nos salió la guerrera que tenemos adentro las madres, porque el hijo es lo más sagrado», analizó.
Por eso, aclaró que una de las misiones de Abuelas de Plaza de Mayo es «que esto se sepa para que los que sufren los que nosotros sufrimos tengan herramientas y sepan a dónde recurrir». Luego, lamentó que quedan en vida pocas abuelas, pero destacó que siguen a cargo las y los nietos encontrados, a quienes calificó como «el relevo perfecto».
«Todos somos argentinos y vivimos en este país, tenemos que amar al país y entre nosotros, no todos pensamos lo mismo pero las diferencias no nos hacen enemigos, tenemos que pensar en ayudar al que menos tiene, ayudar al que gobierna porque hay tantas dificultades que impiden que este país riquísimo sea uno en donde la pobreza no exista», expresó.
Finalmente, señaló que «la gente humilde se ayuda entre ella, pero el que tiene la plata y no sabe qué hacer con ella y no lo quiere rendir para evitar estas desgracias como que haya chiquitos que mueran de hambre», a lo que agregó que «el odio no lleva a nada, el amor, no la tolerancia sino el entendimiento, de que aunque pensemos distinto no somos enemigos».