Tal como estaba previsto, la dirección municipal de Bromatología desarrolló este lunes en el Centro Cultural Ernesto Sábato, un nuevo curso integral de manipulación de alimentos, abierto a toda la comunidad.
Además de la capacitación en manipulación de alimentos, también se ofrecieron conceptos sobre la alimentación saludable.
En este sentido, cabe recordar que concientizar y capacitar para producir y distribuir alimentos sin riesgo para la salud de la población es uno de los ejes fundamentales en la tarea de la dirección municipal de Bromatología.
Esta actividad es de cumplimiento obligatorio para obtener el carnet de manipulador que es válido en todo el país a través de su inscripción en los registros del Ministerio de Desarrollo Agrario.
Esta credencial la deben tener todas aquellas personas que estén vinculadas en cada una de las etapas que va atravesando la elaboración de los productos alimenticios hasta que llegan a la mesa del consumidor. Su validez es de tres años debiendo renovarse con una correspondiente actualización.
Uno de los principales objetivos es prevenir el Síndrome Urémico Hemolítico, que es endémico en el país. En los últimos tres años hubo un aumento confirmado de casos de personas con el SUH en la Argentina, según el Ministerio de Salud de la Nación. Los casos habían estado en descenso desde 2014 hasta 2021 pero desde ese año, la cartera sanitaria verificó un “ligero aumento”, que pasa de una tasa de 0.30 por cada 100.000 habitantes a una de 0.34, según lo informó en su último Boletín Epidemiológico. Esto significa un 13,33% de incremento de casos.
El SUH es una enfermedad grave, caracterizada por daño agudo de los riñones, asociado a alteraciones en las células de la sangre: trombocitopenia (reducción de plaquetas, necesarias para formar los coágulos) y anemia (causada por ruptura anormal de glóbulos rojos). Afecta a niños y niñas menores de cinco años principalmente, pero también a embarazadas, adultos mayores y personas con su sistema inmunológico debilitado.
No hay tratamiento específico para esta enfermedad, pero sí puede prevenirse, por ello el Colegio de Nutricionistas de la Provincia de Buenos Aires recomienda:
-Evitar que los alimentos pierdan la cadena de frío, adquirir lácteos y carnes al final de la compra.
-Guardar las carnes en los estantes inferiores y evitar que sus jugos se derramen en otros alimentos.
-Separar los alimentos crudos y cocidos en recipientes diferentes para evitar la contaminación cruzada.
-Evitar descongelar las carnes bajo el chorro de agua caliente o en la mesada para prevenir la contaminación. Se sugiere descongelar en la heladera.
-Realizar un correcto lavado de manos, previo a la manipulación de alimentos.
-Lavar adecuadamente frutas y verduras; si no hay agua potable colocar dos gotas de lavandina por litro de agua y dejar reposar 20 minutos.
-Utilizar tablas y cuchillos diferentes para alimentos crudos y cocidos y cocinar a temperatura mayor a 71 °C.
-Fomentar el lavado frecuente de las manos luego del cambio de pañales, uso de sanitarios y antes de preparar o ingerir alimentos.