La Secretaría de Transporte dictó la conciliación obligatoria pero el gremio La Fraternidad asegura que la baja velocidad no es una medida de fuerza.
En las últimas horas, la Secretaría de Transporte de la Nación presentó un pedido formal de conciliación obligatoria ante la cartera de Trabajo, con el objetivo de frenar la medida sindical del gremio La Fraternidad y garantizar la circulación normal de los trenes metropolitanos, que desde ayer circulan a tan sólo 30km/h.
En respuesta, el sindicato ferroviario liderado por Omar Maturano rechazó que se trate de un paro o una medida de fuerza de La Fraternidad, y sostuvo que la reducción de velocidad a 30 km/h se debe a razones de seguridad ante el deterioro de vías, la mala señalización y la falta de personal en ciertos ramales.
En tanto, desde el Ejecutivo nacional argumentan que la medida gremial afecta severamente a los usuarios del AMBA, y califican la modalidad adoptada como una forma de extorsión por parte de los trabajadores de trenes, por lo que buscan con la conciliación obligatoria restablecer el servicio habitual.
Al mismo tiempo, desde la Secretaría de Transporte, encabezada por Luis Pierrini, insisten en que la circulación de los trenes a 30km/h no puede extenderse por varios días más, ya que los pasajeros no pueden estar sujetos a “maniobras de presión que interrumpan su movilidad obligada”.
Por su parte, La Fraternidad insistió en que su accionar no está paralizando el servicio, sino que sus maquinistas circulan bajo una velocidad reducida por “precaución”. Es que, desde el gremio alegan que las vías están en mal estado, que hay fallas en los sistemas de señalización y que en varios ramales hay escasez de personal tras retiros voluntarios, situaciones que “pone en riesgo” tanto a pasajeros como al personal ferroviario.
Transporte dictó la conciliación obligatoria para que los trenes vuelvan a circular con normalidad, pero desde La Fraternidad advierten que no hay tal medida de fuerza, sino que circulan a 30km/h por seguridad.
El ida y vuelta entre la administración libertaria y el sindicato no concluyó: desde el Gobierno alertaron que las líneas sufren cancelaciones, demoras y que los usuarios estaban retenidos en estaciones sin información clara, mientras que desde el gremio sostienen que los operadores “respetan todas las medidas de seguridad”, y que la decisión no es un castigo, sino una responsabilidad ante el estado del sistema.
Por caso, La Fraternidad sorprendió a los usuarios al anunciar desde la medianoche que la modalidad de circulación lenta abarcaría a todos los trenes del AMBA y sin fecha de caducidad. “Buscamos preservar la seguridad de los viajes”, afirmaron en uno de sus comunicados, aunque el Gobierno interpreta que el gremio ejerce “presión política” a través del servicio, por lo que apeló a la conciliación obligatoria.
Sin embargo, el pedido de conciliación se formalizó luego de que la medida fuera pública. En función de ello, el Ejecutivo sostuvo que “no podía demorar más la acción”, y que debía hacerse valer la normativa laboral para proteger a quienes dependen diariamente del transporte ferroviario.
Los trenes del AMBA circulan a 30 km/h a pesar del pedido de conciliación de Transporte
Los servicios de las líneas Roca, Mitre, San Martín, Sarmiento, Urquiza y Belgrano Sur circularon este miércoles con velocidad máxima de 30 km/h, ocasionando demoras significativas y cancelaciones. A primera hora de este jueves, Trenes Argentinos informó que más de un millón de pasajeros resultaron afectados por esta protesta encubierta.
Trenes Argentinos estimó que la protesta gremial de La Fraternidad afecta a más de un millón de pasajeros en el AMBA.
De acuerdo a la compañía estatal, la reducción de la velocidad a 30 kilómetros por hora impacta de lleno en la regularidad de los servicios y altera la rutina de los usuarios que dependen del tren como principal medio de transporte. En consecuencia, las demoras prolongadas y la cancelación de servicios provocaron largas esperas y andenes colmados en las principales estaciones del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
“Ante esta medida se ven perjudicados más de un millón de pasajeros que utilizan los trenes cada día para trasladarse a sus trabajos o regresar a sus hogares”, advirtió Trenes Argentinos en el cierre del comunicado, con el que buscó remarcar la magnitud de los efectos que genera la protesta gremial.