Salud

El vínculo no tan conocido entre la amigdalitis y el dolor de oído

junio 17, 2025

Con la llegada del invierno, las infecciones respiratorias se multiplican. El frío, el aire seco y los ambientes cerrados con poca ventilación favorecen la circulación de virus que afectan tanto las vías respiratorias como los oídos. No es raro que durante un cuadro de faringitis o amigdalitis aparezca molestia en los oídos, aunque muchas veces pase desapercibida o no se le dé importancia.

Aunque solemos asociar estas complicaciones con los más chicos, los adultos también pueden sufrir alteraciones del oído medio vinculadas a infecciones en la garganta, sobre todo en los meses más fríos, cuando las defensas naturales suelen estar más debilitadas.

El dolor de oído puede parecer un síntoma aislado, pero tiene una explicación anatómica: el oído medio se conecta con la parte posterior de la garganta a través de la trompa de Eustaquio, un conducto que equilibra la presión y drena fluidos. Cuando la garganta se inflama, como sucede en la amigdalitis, esta trompa puede bloquearse y generar molestias en el oído.

¿Qué es la amigdalitis y cómo puede afectar la audición?

La amigdalitis es la inflamación de las amígdalas, unas glándulas linfáticas ubicadas en la parte posterior de la garganta que cumplen un rol clave en la defensa inmunológica, especialmente en la infancia. Ayudan a combatir infecciones virales y bacterianas.

“Este bloqueo puede provocar síntomas como sensación de oído tapado, zumbidos o incluso dolor intenso. En algunos casos, puede desencadenar una otitis media si el cuadro de base no se trata adecuadamente. Este fenómeno se conoce como otalgia: el oído duele, pero la causa está en otra parte, muchas veces en la garganta”, explica la licenciada Agustina Leiro, fonoaudióloga de GAES.

Según datos del Ministerio de Salud de la Nación, más de 1,3 millones de niños menores de 14 años fueron atendidos por infecciones respiratorias en el último año, y el 12% presentó complicaciones relacionadas con los oídos.

Los adultos tampoco están exentos: el British Medical Journal indica que casi uno de cada tres adultos con amigdalitis viral o bacteriana manifiesta síntomas auditivos temporales, como presión o dolor en los oídos.

Señales de alerta

Si tenés dolor de garganta, prestá atención a estos signos, ya que podrían indicar compromiso del oído:

Sensación de oído tapado o presión interna (como si hubiese agua).

Dolor de oído sin causa aparente, especialmente si aparece junto al dolor de garganta.

Mareos o vértigo leve, posible señal de inflamación en el oído interno.

Hinchazón detrás de la oreja o ganglios inflamados en la zona.

Secreción de líquido por el canal auditivo, signo claro de posible infección.

Detectar estos síntomas a tiempo permite actuar con rapidez y evitar complicaciones mayores.

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