secretario de Obras Públicas de la Nación, Luis Giovine, asistió a la convención anual de la Cámara Argentina de Construcción (CAMARCO) y adelantó que casi 400 obras que se encontraban paralizadas continuarán su desarrollo. La suspensión de la obra pública fue una de las primeras medidas aplicadas por el Gobierno Nacional luego del cambio de gestión y produjo un efecto adverso en el sector, cosechando aproximadamente 100 mil despidos en lo que va del año.
La oficina de la que se encarga Luis Giovine depende del Ministerio de Economía, a manos de Luis Caputo. Giovine explicó el panorama que se encontró el gobierno de Javier Milei y cual será el futuro de las 6 mil obras «heredadas» del gobierno de Alberto Fernández. «De 6 mil, poco más de 2.700 estaban en ejecución, neutralizadas o paralizadas. Para muchas de ellas no era necesario que el Gobierno Nacional esté presente, pues son muy pequeñas y corresponden a municipios con baja capacidad de administración», expresó el funcionario.
«El Estado decidió apartarse de estas y enfocarse en aquellas con valor estratégico», agregó. Ente los proyectos que se reanudarán se encuentran el Puerto de Rosario en Santa Fe o la Autopista 19 que une Córdoba con San Francisco. Giovine confirmó la reanudación inmediata de 376 obras en 15 provincias y la discontinuación de 900, entre las que se encontraban reparaciones, ampliaciones y construcciones pequeñas.
Por otro lado, 194 serán traspasadas a las provincias, que podrán administrarlas dependiendo de su presupuesto; 357 serán reprogramadas sin fecha estipulada. Así, el Gobierno nacional trazó su plan para reactivar parcialmente el sector público de la construcción.
