La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) afirmó que hubo más de 11.000 nuevos despidos durante el fin de semana y ratificó el plan de lucha del miércoles que contempla un paro y la ocupación de oficinas y dependencias públicas.
En su cuenta de Twitter, el secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar, señaló que “durante el fin de semana contamos más de 11.000 despidos. El Presidente ha decidido quebrantar el sistema jurídico argentino en su parte medular y tanto él como sus funcionarios podrían terminar presos”.
Asimismo, enumeró las distintas leyes y pactos que el Gobierno estaría violando a partir de esta baja en los contratos, como la Constitución Nacional, el Código Penal y el Pacto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, “que obliga a los Estados a proteger el trabajo y garantizar el pleno empleo”.
“No sería precisamente esto lo que está ocurriendo”, agregó el gremialista. En tanto, remarcó que el miércoles a las 16 habrá un plenario federal “para profundizar el plan de lucha”. ATE, que cuenta con unos 350.000 afiliados en todo el país, activará una protesta en los lugares de trabajo.
“Tenemos que demostrar que es el Gobierno el que actúa al margen de la Constitución y de la ley. Por la mañana, los trabajadores con nuestros ingresos masivos y simultáneos estaremos ejerciendo nuestros derechos de huelga, manifestación y reunión. Si hay violencia y represión, la única responsable será la Casa Rosada”.
La protesta del miércoles se enmarca en una escalada de conflictividad luego de los dichos del presidente, quien aseguró que caerán 70.000 contratos más.
La semana pasada, ATE envió una nota al Ministerio de Capital Humano en la que le anunciaba a la titular de la cartera, Sandra Pettovello, la medida de fuerza y detallaba los motivos detrás del reclamo.
“Nos dirigimos a usted a los efectos de informar que nuestra entidad sindical ha resuelto llevar adelante una jornada nacional de lucha con paros, asambleas y movilizaciones en todo el territorio nacional durante 24 horas el día 3 de abril del corriente año convocando a un ingreso masivo y simultáneo a todos los organismos de la Administración Pública Nacional”, se lee en la carta.
“La amenaza de despido de 70.000 trabajadoras y trabajadores del Estado nacional no solo devela un total desconocimiento de la gestión, sino que además conlleva la nefasta práctica de intentar infundir miedo”, continúa el comunicado. (DIB)