Nico Valinotti y Fede Alpuín: Un
puente musical, a través del charco
El reconocido músico rojense y su colega charrúa unieron esfuerzos para la creación de una serie de EPs (Recién Paridos, De Pie, y En cambio), que vió la luz a lo largo de un proceso tan sensible como artesanal
El reconocido músico rojense Nico Valinotti y su colega charrúa Fede Alpuín, unieron esfuerzos para la creación de una serie de EPs (Recién Paridos, De Pie, y En cambio), que vió la luz a lo largo de un proceso tan sensible como artesanal, y que los llevó, tendiendo una suerte de punte musical, a distintos lugares de Uruguay y Argentina.
En El Nuevo en Radio, Nico contó que “hemos tenido pocos encuentros con Fede, pero esto es algo que viene de larga data, ya que nos conocimos en la casa Cultural Víctor Jara, de Buenos Aires, donde compartimos fecha cada uno con nuestras bandas y durante la noche nos hicimos buenos amigos. Luego él se volvió a Uruguay y yo me quedé en Argentina, hasta que las vueltas de la vida han querido que en algún momento yo haya armado algo para ir a tocar allá y me contacté directo con él para saber cómo era la movida por allá. En ese momento me comentó que hacía bastante que no estaba tocando, pero que fuera igual que algo se podía armar”.
-Fede: En el momento que Nico se comunica conmigo yo estaba en una situación sentimental compleja, cerrando una relación de años, y en eso me llega una sugerencia de un video de YouTube, que era justamente suyo haciendo unos trabajos que había titulado Recién Paridos, era él con el celular y nada más. Para mi fue como una señal, algo que me emocionó, y rápido Nico se vino para Uruguay. Nos encontramos en el Cerro de Los Burros, en Maldonado, conseguimos un ranchito que ni cerradura tenía (risas), llevé los instrumentos y terminamos cuatro días juntos grabando un disco.
-Nico: Todo fue fluyendo de una manera inesperada en lo que respecta a la composición, a la producción, ya que ninguno de los dos anteriormente había podido componer codo a codo con otra persona, así que cada uno aportó lo suyo, y pasó que antes de cerrar las canciones ya las estábamos grabando.
-Fede: Lo novedoso para nosotros y que realmente nos cambió el paradigma y la forma de trabajo hacia adelante fue el tema de los tiempos, porque veníamos de procesos en cuanto al armado de discos que llevan años de producción, y esto fue muy espontáneo, y creo que nos salió bien.
-Nico: Grabábamos con lo que teníamos, que eran dos guitarras, una batería electrónica y no teníamos bajo, por lo cual dijimos que lo que se grabara iba a quedar, hasta que de repente se acercó un amigo de Fede al que le gustó lo que estábamos haciendo y se trajo un bajo el último día, era algo prácticamente intocable, pero lo terminamos igual, haciendo algunas repeticiones, y eso es lo que quedó en Recién Paridos, que es el primero de este ciclo de EPs de mediana duración, que luego continúa con De Pie, y el tercero es En cambio. Recién Paridos lo hicimos en un período corto y considero que es el más visceral de todos.
-Fede: Hicimos cuatro canciones en cuatro días, fue algo raro: es evidente que una conexión había entre ambos, por eso es que en el último día pensamos en que había que darle otra forma al proyecto. Fue ahí cuando Nico me comenta que tenía una amiga en Girona, España, Maylén Navas, que se encargaba de hacer ilustraciones, a ella le encantó la idea y nos mandó la tapa, o sea que lo terminamos por completo en un tiempo récord.
-Nico: Fue todo tan espontáneo que el laburo que tuvimos que hacer en cuanto al orden de las cosas fue posterior respecto a la parte creativa de la música. Y ya en nuestro segundo encuentro, cuando hicimos el disco De Pie, nos juntamos sabiendo qué era lo que íbamos a grabar, algo que no había pasado en el primero, donde yo llevé algunas idea y Fede fue sumando sus conocimientos. En mi caso estaba muy enfocado en componer y en una cosa más existencial, era lo que salía en ese momento.
-Fede: El hilo que nos unió fue que los dos estábamos cerrando unas relaciones de parejas de años y teníamos un desfasaje en el tiempo, porque él ya estaba terminando con sus cuestiones, mientras que en mi caso estaba en pleno proceso, y eso es algo que me tenía bastante trancado, al menos en los tres primeros días, en tanto ya en el cuarto es como que me pude soltar, y fue lo que nos llevó a decir que nos teníamos que volver a encontrar para arrancar algo desde cero, por eso en la portada del primer disco aparece la imagen de la madre con su bebé, o sea que era el embrión del proyecto.
-Nico: En De Pie hay unas cuestiones que son muy divertidas, en principio porque nos juntamos en el monoambiente en el que yo vivía, en Chacarita, donde grabamos percusiones con un rallador de zanahoria (risas). Fue mucho más experimental musicalmente, en mi caso estaba con las guitarras y algunas cosas las grabábamos pegándole con un palo a la guitarra simulando un berimbao, que es un instrumento brasileño; jugamos un poco más con lo sonoro, encarnando otras voces.
-Fede: No nos pusimos límites, le dimos siempre para adelante, y en este caso fueron seis días, todo muy artesanal, donde el pie del micrófono era el pie de una lámpara, o sea que parte de la posibilidad de avanzar era que nada se vetaba: si uno quería hacer algo, se hacía, quizás sin saber hacia donde íbamos, pero encausados en un proceso. El Recién Parido ya estaba De Pie, y creo que fuimos evolucionando.
-Nico: Ya para De Pie estábamos con el concepto bien armado, fue un poco más elaborado, se ve la impronta de ambos, hay temas más con la impronta de Nico, otros con la mía; es muy heterogéneo lo que se logró en la mezcla de los estilos de cada uno, considero que la trilogía tiene un relato marcado, y nuevamente Maylén nos ilustró de manera perfecta, ahora con un hombre de espaldas, semidesnudo, ya caminando, un niño que ya está entrando en la naturaleza. Mientras tanto hay que señalar que se fueron sumando amigos también, como Cocu, que le sumó la armónica y fue una belleza, con una impronta tanguera perfecta.
-Nico: Lo que siempre decimos es que nos hace falta es tocar, porque hasta ahora nos juntamos y grabamos, tenemos ideas creativas que plasmamos al instante, pero nunca tocamos en vivo. Entonces sentimos que falta esa pata, que hay algo incompleto en el proyecto, que ya tiene la semilla que es el disco y que está elaborado y bien picante, es más, podríamos hacer una lista de veinte temas propios para tocar cuando sea.
-Fede: Siguiendo la cronología, tenemos las cuatro canciones en Uruguay, más seis entre Chacarita y Montevideo. Son diez canciones en total, con un trabajo que nos cambió la manera de hacer música y cómo registrar el momento, lo que a veces en procesos más engorrosos o megaproducciones no aparece. En este caso lo que hicimos tiene que ver más con la frescura y la espontaneidad. Ha sido un ejercicio sumamente motivador, y por eso es que llegamos a un tercer encuentro.
-Nico: Para el tercer EP dijimos que tenía que ser el cierre del ciclo y también tenía que ser algo diferente. Entonces después de Recién Paridos y De Pie, lo que más se adaptaba a lo que estábamos buscando era el concepto de cambio, la mutación: el final del proyecto. Trabajamos sobre el concepto del cambio y lo más explícito era hacer cosas que no habíamos hecho antes, sin salirnos de lo espontáneo, y nos planteamos hacer cuatro temas, cada uno con su videoclip diferente, todos grabados por nosotros.
-Fede: En el tercer trabajo hicimos una parte en Tigre, donde vivía Nico, un lugar maravilloso, en contacto con la naturaleza, donde el viento nos movía la cámara que estaba sobre una escoba dada vuelta y nos dejó planos maravillosos, así que salió la canción Viaje hacia la raíz, también con el video.
-Nico: En Tigre hicimos diferentes tomas de las cuales salieron varias imágenes que están en otros videos, como por ejemplo en Caparazón, que es un tema bien pop de los ‘80, temas que fueron diferentes unos de otros, que es algo que formaba parte del cambio.
-Fede: También hicimos Tragarme la llave, que fue una canción que tenía un tinte hacia ideas de despojo y de búsqueda interna, y decidimos irnos a Troncos del Talar, donde hablamos con un referente barrial. Allí había niños jugando que participaron, sacamos un parlante y se empezaron a sumar también los vecinos. Se armó un bailongo bárbaro a las 11 de la mañana (risas)…
-Nico: Luego nos fuimos a Montevideo, donde refinamos el trabajo y se resaltaron algunas cuestiones, pero sin cambiar la impronta, ahora Maylén reflejando un pez emprendiendo vuelo en un universo multicolor. Uno de los temas más disruptivos en este EP se llama La marea, que es un tema corto, una cumbia que parece una fiesta de los años ‘50, con un sonido bien distorsionado, y el video es un baile de campo, con gente de la tercera edad.
-Nico: No sabemos cómo sigue todo esto. Por ahora estamos juntos en Rojas, sin pretensiones. Traje todas las cosas para grabar, o sea que si sale algo, bárbaro, tenemos muchas ganas de tocar y así como la primera vez que nos juntamos no teníamos ni idea de lo que íbamos a hacer, ahora no tenemos ni banda ni lugar, pero tenemos tres discos. Nuestro anhelo es tener una banda en Argentina y otra en Uruguay como para poder juntarnos y tocar cuando salga una fecha, y que siga siendo espontáneo como hasta ahora.
-Fede: Queremos tocar las canciones y que la gente conozca esta historia que fue maravillosa, que tuvo un cierre en cuanto al trabajo, pero nos falta esa parte que la consideramos esencial, que es encontrarse a cantar, a que alguien nos escuche, cosas que a lo mejor cuesta en las grandes ciudades, pero que en el interior sucede. Además es mucho más simple, sea en Rojas o en Uruguay, lugares donde creo que se puede lograr la desvirtualización del arte, dejar de lado el Instagram para llevar el arte directo a las personas, a sentir la vibración, la energía; queremos que ese desparpajo y esta felicidad que nos llevó a esto también lo pueda recibir el público…
