El gobierno municipal puso en marcha una campaña oficial para recordar las precauciones básicas que eviten la presencia de monóxido de carbo en espacios cerrados
Se avecina la etapa crucial de la época fría del año, y con ella el momento en que inexorablemente se enciendan las estufas a gas de decenas de miles de hogares en la Región. Junto a ellas, también tendrán mayor actividad los calefones y cocinas, y se cerrarán puertas y ventanas para blindar las casas de las bajas temperaturas. Estos días marcan también el inicio de las campañas de concientización para reducir la tasa de descuidos y negligencias que cada ciclo invernal, en nuestro país, se llevan doscientas vidas.
Las estadísticas marcan que cada cuatro horas hay un accidente vinculado con la inhalación de monóxido de carbono. Una cifra que estremece e incluye a ancianos, adultos y niños que perecen por estar en ambientes mal ventilados o cerca de artefactos que no funcionan bien.
En ese sentido, el gobierno municipal puso en marcha oportunamente el plan “Invierno Seguro”. Desde la comuna recomiendan “revisar calefactores y conductos de gas con un gasista matriculado”.
Además, desde el municipal recuerdan:
-Colocar en la cocina rejillas reglamentarias y mantener las hornallas limpias de líquidos y alimentos.
-Asegurarse de que la llama de elementos que generan combustión sean azules y uniformes. Si son anaranjadas, débiles, irregulares y/o fluctuantes, consultar urgente a un gasista matriculado.
-Ventilar permanentemente todos los espacios, dejando una rendija abierta para la entrada de aire desde el exterior.
Desde la empresa Camuzzi advierten que “si bien el gas natural es un combustible seguro, es fundamental estar atentos al estado de los artefactos y de la instalación interna de la vivienda para evitar situaciones de peligro”.
Las estadísticas marcan que cada cuatro horas hay un accidente vinculado con la inhalación de monóxido de carbono
“No hay que correr riesgos, porque el monóxido mata” subrayan desde la firma: “se genera por el mal funcionamiento de los artefactos a gas, y la falta de mantenimiento o el deterioro de las instalaciones internas; se concentra por la escasa ventilación, y si es inhalado en grandes cantidades puede provocar daños cerebrales irreversibles”.
Este asesino silencioso -es inodoro, incoloro, insípido y no irritante-, duerme y luego mata. Muchas de sus víctimas se acuestan a dormir y ya no despiertan. No suele ofrecer segundas oportunidades. Por este motivo, es clave seguir a rajatabla una serie de procedimientos de seguridad; entre ellos, uno de los indispensables es mantener una ventilación permanente de los ambientes, aún en los meses de invierno. Una rendija en las cortinas, una ventana entornada, pueden salvar vidas.
Además, se debe verificar periódicamente y con gasistas matriculados el funcionamiento de los artefactos a gas, sus conductos de evacuación de gases en el caso de los de tiro balanceado y calefones, y las rejillas de ventilación de los ambientes, que no deben estar obstruidas bajo ninguna circunstancia.
Los calefones y calefactores de tiro “natural”, así como las estufas de tipo infrarrojo, no deben colocarse en baños o dormitorios, por su elevado consumo de oxígeno; en los ambientes cerrados, se recomienda que los artefactos de calefacción a gas sean precisamente de tiro balanceado.
El uso de hornallas y hornos para funciones de calefacción también se desaconseja, porque su combustión insume mucho oxígeno ambiente. Se recomienda chequear que la llama de los quemadores siempre sea de color azul, con los extremos transparentes; una llama amarilla o anaranjada es una señal de que algo está funcionando mal.
Para cualquier emergencia, Camuzzi ofrece los números telefónicos 0-800 666-0810 y 0810-666-0810, las 24 horas y los 365 días del año.