Convocó para mañana a un debate en comisiones del proyecto que crea un ingreso permanente destinado a los sectores más marginados
Gustavo Ybarra – LA NACION
Con los indicadores sociales encendiendo alarmas y la interna oficialista al rojo vivo, el sector oficialista que responde a Cristina Kirchner decidió avanzar en el Senado con la aprobación de un ingreso especial similar a la canasta básica alimentaria, que en agosto fue de $17.149, para aquellas personas que se encuentren por debajo de la línea de indigencia.
La iniciativa fue presentada por la ultracristinista Juliana Di Tullio (Buenos Aires) tres meses atrás y su tratamiento había quedado congelado tras el anuncio del Gobierno de que daría un refuerzo con parte de los fondos recaudados por la implementación del denominado dólar soja.
Ahora, cuando se sabe que el Gobierno decidió que el aporte será tan sólo por dos meses y lo percibirán sólo quiénes no reciben ningún otro tipo de ayuda, el sector kirchnerista del bloque oficialista decidió desempolvar la iniciativa.
El proyecto será discutido mañana, a partir de las 12, en un plenario de las comisiones de Trabajo y de Presupuesto y Hacienda y todas las señales, como el énfasis para reunir quórum que han puesto los legisladores kirchneristas al momento de convocar a sus compañeros de bancada, indican que la intención es emitir dictamen. De así hacerlo, el texto quedaría en condiciones para su tratamiento en el recinto de la Cámara alta la semana próxima.
El escenario no podría ser más complejo y volátil para el oficialismo. Además de las quejas públicas del kirchnerismo contra el gobierno nacional, plasmadas en el discurso de Máximo Kirchner en el acto por el Día de la Lealtad; en Diputados se discute el presupuesto en medio del tironeo por el reparto de fondos, sobre todo de parte de las provincias gobernadas por el peronismo.
En ese sentido, el proyecto que garantizaría un ingreso fijo a quienes se encuentren por debajo de la línea de indigencia tiene un alto costo fiscal reconocido por la propia Di Tullio.
El costo para todo el año próximo podría ascender al 0,6% del PBI, una cifra superior a los $400.000 millones, según confió Di Tullio hace dos meses cuando mantuvo una reunión en el Senado con organizaciones sociales. En ese encuentro, la senadora dijo que el proyecto había sido pedido por Cristina Kirchner.
La senadora había mantenido conversaciones con el ministro de Economía, Sergio Massa, quien se habría comprometido a reasignar partidas para financiar el “refuerzo de ingresos”, tal el nombre de la ayuda social que impulsa Di Tullio, y a incluir esos fondos en el presupuesto del año próximo.
La iniciativa que se discutirá este jueves crea un “refuerzo de ingresos” similar a la canasta básica alimentaria que tendrá por “objeto reducir la indigencia en todo el territorio nacional”. La prestación será mensual, no contributiva y tendrá la vigencia de un año, pudiendo renovarse siempre y cuando se cumplan los requisitos que establezca la ley.
Al respecto, podrán acceder al beneficio los hombres de 25 a 64 años y mujeres de 25 a 59 años que no perciban ningún otro plan social ya se sean del orden nacional, provincial o municipal, jubilación, pensión o seguro de desempleo.